Irlanda se veía aún más hermosa que hace 18 años atrás, Nasima no podía creer que luego de tanto tiempo al fin estaba una vez más en el pueblo que tanto amaba, había extrañado el verde de sus colinas y el bosque tan peculiar. Aun sabiendo que no podría vengarse de aquel hombre que una vez amo, se sentía en paz.— ¿Estás bien Nasi? — la voz de Yannick la hizo voltear.— Mejor que nunca Nick, mejor que nunca. — la brisa cálida que viajaba a medida que la pelirroja caminaba dejaba ver que era verdad.Hacía más de 24 horas que habían llegado a Irlanda, pero se quedaron en la ciudad el primer día, fue hasta después que los Petrov se ocuparon de comprar las maquinarias para sus empresas que decidieron ir al pueblo donde Vivian Campbell fue asesinada por su esposo Trevor.Por pedido de la pelirroja no se det

Dos meses habían pasado desde que regresaron de Irlanda, a Nasima cada vez se le dificultaba más escapar de Yannick, más aun de sus manos que se habían empecinado en querer abrazarla a cada rato, justo ahora que el vientre de la pelirroja comenzaba a crecer a su pelinegro se le daba por ser cariñoso, por suerte sus hermanas estaban siempre al pendiente y evitaban cualquier contacto, limitado todo a simples besos, pero pronto tendrían que renunciar oficialmente a sus alas, lo más importante en cuatro meses terminaría su contrato y ellas deberían dejar la mansión Petrov.— Anni ¿podemos hablar un minuto? — Milos la había estado esperando en el jardín delantero por más de una hora.— Claro, chicas nos vemos después. — sus tres hermanas continuaron su camino sin decir nada más, de todos, estos jóvenes eran los que más tiempo

Al día siguiente abordaron el avión privado una vez más, pero ahora irían a aquel que fue su hogar durante 18 años, sin saber muy bien que era lo que les aguardaba, los hermanos Petrov también estaban ansiosos, no sabían con que se iban a encontrar, según sus hadas este mundo guardaba muchos secretos ocultos como leyendas y cuentos de niños.— Esto es… sorprendente. — Yannick no encontraba palabras a lo que veía, kilómetros de bosque, lagos azules y ríos cristalinos, ni que decir de las montañas de cumbres nevadas que le daban al lugar un aspecto único.— Lo es, pero más sorprendente son las personas que lo habitan. — Nasima le sonrió de forma dulce.Las cuatro jóvenes guiaron el camino, el orfanato segunda vida, era algo imponente a la vista, hecho de madera se camuflaba a la perfección con su entorno.

El día siguiente llego, y junto a él la inquietud de lo desconocido, por alguna razón el orfanato estaba vacío, aun los que habitaban aquel lugar y que eran invisibles a los ojos humanos se habían marchado, las jóvenes lo sentían, en el orfanato segunda vida, solo estaban ellas, los Petrov y las cuatro mujeres que las habían recibido y cuidado.— Creo que ya es tiempo, las están esperando, sus cuatro elementos esperan que regresen lo que les fue prestado. — la mirada dulce de Carol reflejaba cuanto quería a cada una de las niñas.— Aún no sabemos que debemos decir o hacer. — Avani como siempre, primero necesitaba una base firme de la cual partir, como la misma tierra es necesaria para que todo lo demás exista.— Lo sabrán llegado el momento, ustedes pueden esperar aquí. — la hermana Josefa hablo con autoridad, pero tambi&ea

Lo primero que hicieron los ya mayores señores Petrov luego de su llegada fue llamar a sus cuatro hijos al despacho.— No lo puedo creer, lo único que les pedí, no, les ordene, fue que cuidaran a las chicas, ¡¿me pueden explicar cómo es que dos de ellas están embarazadas?!— Exploto la madre de los hombres.— Bueno el como una mujer queda embarazada creo que lo sabes, después de todo somos tus hijos ¿no? — que Yannick estuviera bromeando los sorprendió, su hijo hacía mucho que se había sumido en una seriedad casi absurda.— ¿Hijo te encuentras bien? — Vladimir no pudo evitar preguntar, solo para ver como sus cuatro hijos se carcajeaban.— Debimos de hacerle caso a Milos. — dijo Igor recordando que el menor les había dicho que lo mejor era advertirles a sus padres que ellos estaban manteniendo una relación c

Como cada año desde que se habían convertido en esposos Avani y Milos viajaron a Grecia, celebrarían su aniversario número 30 al igual que las otras parejas, habían llevado una vida feliz y plena, Igor y Kenna tenían a Oriel, Félix, Eimy y Jazmín. Mientras Kilian e Yara eran padres de Gabriel, Alexia y Margot. Nasima y Yannick no se quedaron atrás, ellos tenían a Cameron, Nicole, Luciana, Alejo y Bautista. — ¿Crees que estará bien? — pregunto Milos como lo hacía cada año que viajaban solos a Grecia. — Cariño, tienen 15 años, además están con Nasi y Yannick. — respondió con toda la paciencia del mundo la castaña. — Eso es lo que me preocupa, Nasi las deja hacer lo que quieren. — Esta pareja había tenido trillizas, provocando que Milos se volviera sumamente protector, ya que sus princesas tenían la misma mirada color chocolate que su madre, y también la belleza de esta. — Sabes muy bien que Nayla es tan seria como tú, Ashlym es muy tranquila no darán problemas. — respondió Anni. —