Pov: Melanie— Ya estoy llena — digo tirándome hacia atrás en la silla. — Vamos solo proba ese también — niego porque mi estomago podría explotar en cualquier momento. — Adri amor, ya probe 8, es demasiado — me hace ojitos y acerca el plato. — Un bocadito – suspiro y me incorporo para tomar una cuchara y probar el postre frente a mí.Delicioso, ese es el problema que me dice que pruebe un bocado y termino comiendolo todo así que por eso me duele la panza. — Está buenisimo amor — sonríe y se acerca. — Uno más y listo ¿Si? — ruedo los ojos y lo estiro para besarlo. — Uno solo más — se va a la cocina a hacer más cosas. — Ya casi tengo toda la cartilla armada, estoy nervioso — dice mientras prepara el siguiente postre.— Va a salir todo bien, sos el mejor para hacer cosas dulces.Mañana se inaugura la cafetería, mi dulce Miel se llama y no digamos nada porque fue idea de Adri y aunque dije que no, el dijo si si si, pero al menos sé que piensa en mi cada día que este trabajando ahí.

Pov: Adriel.Algunos meses despues— ¿Serás mi padrino cierto? — Morgan rueda los ojos. — Si, claro, aunque ya sabes que pienso de los compromisos, ¿No deberías pensartelo mejor? — lo miro arqueando una ceja. — ¿Por qué? O sea, ya vamos como más de un año juntos — Morgan me miro no tan convencido. — Apenas tenes 20 años Adriel, no lo sé casarse creo que sería un poco mucho, tampoco te digo que tengas 10 novias distintas como yo, pero al menos no sé esperarte a los 30 — frunzo el ceño y niego.— No seas idiota, Mel ya tiene 30 años y aparte — miro la cajita en mi mano — Sabes que estoy enamorado de ella desde hace demasiado tiempo, vamos Morgan se romántico por mí una vez en la vida, ella es la mujer de mi vida y lo sabes — suspira y me abraza.— Eso veo, saliste tan romántico — Despeina mi cabello. — No puedo creer que te vas a casar, o sea yo siento que apenas empece a vivir y vos te vas a casar — me río de lo dramático que es.— Cuando encontrás a la mujer para vos no hay que dej

Pov: AdrielUn año después Veo a todos ir de un lado al otro y nunca pensé que estuviera tan nervioso como ahora, mis manos tiemblan y siento que sudo.— ¿Listo? — miro a mi papá y asiento. — Sabes que todos piensan que estás loco ¿No? — me río.— Lo sé, pero no lo estoy.— Y yo lo sé, yo hubiera deseado ser como vos, jugarmela sin miedo y solo entregar mi corazón sin pensar, te admiro hijo y soy feliz de que seas feliz, más aún si es con quien amas — lo abrazo y con lo sensible que soy ya quiero llorar. — Se supone que la novia llora papá — se carcajea.— Cuando me case con tu mamá, sentí que cuando entro a la iglesia no iba a poder aguantar a besarla hasta que el cura dijera todo su discurso, estaba hermosa, era algo que nunca en mi vida hubiera hecho, casarme, pero tu mamá es especial, con vos es diferente, esto lo deseaste siempre así que llora porque te vas a casar una sola vez hijo y cuando Mel entre por ahí puedo asegurarte que será el mejor momento de tu vida — suspiro aguan