Lo que me dijo Yasar me tenía dando vueltas y vuelta, —terminaron de entregarme mis pertenencias, celular, llaves y mis documentos—. Al dirigirme a la salida donde esperaba papá y la abogada, me preocupó la expresión del señor Juan Carlos. No sé si se quedó toda la noche por remordimiento ante lo que ocurrió o quien sabe, si la lejanía de la familia, mientras yo encerrado, le permitió mover sus fichas, debe estar dando órdenes para enfrentar a Emilio, no obstante, la jugada que hizo la Araña con mi madre se lo agradezco… Porque así no me quedó a mí la responsabilidad de dar tal noticia, me tenía pensando el modo dar ese golpe al corazón a mi madre. La ansiedad me tenía desesperado. Tal vez imito a Gamal en el tema de masticar chicles, para ver si eso me calma los nervios ante lo que va a pasar cuando mis padres se vean. Miré el celular antes de hacer acto de presencia y leí todos los mensajes enviados por el equipo. —Señor Jabir, le recuerdo que tiene cuarenta y ocho horas para sal
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