Capítulo 161. Pausa académica, parte 1 Narra David De María RamírezEstaba demasiado agradecido con el permiso que me dio la doctora Andrade, prácticamente me dio una semana más de tiempo, me tenía que internar el domingo, pero como tenía demasiados pendientes en la universidad y no sabía de qué manera se iban a resolver, tuve que aplazar la entrevista al lunes y con eso tuve otra semana extra de tiempo para solucionar mis pendientes. Mi madre me acompañó ese mismo lunes, al dejar la clínica de rehabilitación a la universidad, donde íbamos a hablar con el encargado de la ingeniería sobre mi situación.–Madre, en verdad siento mucho todo lo que te estoy haciendo pasar – Me disculpé - Te tuve que hacer que dejaras todo en México y eso no me gusta nada. Sé que tú tienes que hacer tus cosas y te he hecho descuidar todo por mí.No me gustaba causarle este tipo de molestias a mi madre y aunque estaba agradecido por haber venido, ella tenía también sus asuntos que atender allá en Méx

Capítulo 162. Pausa académica, parte 2 Narra David De María RamírezHabía perdido totalmente mi rumbo, lo había dejado todo atrás como si la carrera no fuera importante para mí, ni para nadie más, ahora tengo que resurgir y sacar adelante esta carrera que tanto le ha costado a mucha gente, no era una excusa el que me fuera a la clínica de rehabilitación, porque en primer lugar no debería estar en esta situación.–Nunca he sido un estudiante de 100, pero quiero mejorar y ahora no lo tomo como excusa, pero la adicción me ha desviado del camino y por eso prefiero tomar la pausa académica y después, ya que esté recuperado, poder retomar mis estudios aquí.Regresé de México para terminar la carrera en la universidad de Madrid y eso lo iba a conseguir nada me iba a impedir truncar mis sueños, yo lo iba a lograr fuera como fuera. Las drogas iban a dejar de ser un obstáculo en mi vida, porque las iba a dejar definitivamente, ese es el motivo de la pausa académica.–Nunca es tarde, par

Capítulo 163. Regresando a casaNarra Alondra Ferreyra PérezDespués de ese fin de semana tan divertido en Ciudad de México, mi Batman, Simone, Nacho y yo, tuvimos que volver a Morelia para regresar a las actividades diarias que íbamos a tener. Me sentía demasiado feliz, era como si ese fin de semana hubiera cambiado muchas cosas en mí y en cierto modo sí que lo hizo.Nunca esperé que nadie me hiciera meterme a un lugar como el rollo y con todo y que era un balneario de primera clase, yo no suelo hacer esas cosas y ahora no solo me había atrevido a hacerlo, también me había divertido demasiado y era por mi Batman que yo estaba viendo la vida diferente.–Alondra, invítanos a quedarnos a casa de Carmen. Vamos llegando y estamos muertos – Me dijo Simone – Te prometo que nos vamos a portar bien Nacho y yo.Por supuesto que sabía que estábamos llegando muy cansados, ellos sabían cuáles eran las condiciones para poder quedarse aquí en casa de Carmen, confiaba en Simone y en Nacho y se tenía

Capítulo 164. Muy mala suerteNarra Alondra Ferreyra Pérez–Alondra, mi amor quédate conmigo, abre tus ojos – Era la voz de mi Batman – Preciosa, despierta. Simone, trae alcohol, por favor. Debe haber en el baño.No me acordaba ni que fue lo que me pasó, estaba viviendo como en un sueño, como si no me hubiera despertado nunca, no me sentía muy bien, estaba desorbitada, y me dolía mucho la cabeza y mi corazón retumbaba muy fuerte en mi pecho.–Claro, Batman – Simone estaba llorando histérica – Ya lo traigo.Mi Batman me besó y después olí el alcohol y eso me regresó al mundo, después que sentí que me iba a desmayar o ya no supe si en verdad yo me había desmayado. Al abrir los ojos, Simone lloraba y mi Batman estaba muy nervioso y para agravar las cosas, antes que pudiéramos hacer nada por Nacho tocaron la puerta en la casa de Carmen y era la policía. Me quedé pasmada al ver a dos agentes en la entrada de la casa de Carmen, ¿Ahora qué? Pensé.–Buenos días – Nos saludaron los agentes – H

Capítulo 165. Días terriblesNarra David De María RamírezMis primeros días en el centro fueron terribles, ese proceso de irme desintoxicando me estaba causando demasiado daño. Era muy dependiente de las cápsulas tanto que las quería ingerir todo el tiempo y a todas horas y eso no estaba para nada bien. Yo no podía estar tomándolas ya y por eso estaba ahí recluido, las tenía que dejar, me costara lo que me costara.Un día que no podía controlar mi ansiedad y que estaba sudando frío, me acosté en la cama y abracé al dinosaurio para después cerrar los ojos y recordarla a ella, a mi consentida y estaba relajándome así, recordando los bonitos momentos cuando la doctora Andrade fue por mí.–David, espero no haberte despertado – Ella se disculpó – Vine porque has olvidado que hoy es el primer día de visita y tu madre, te está esperando en mi consultorio.Era la mejor noticia que había recibido en mucho tiempo, ni siquiera había pasado por mi cabeza que hoy era el primer día de visitas, ya q

Capítulo 166. Un hermoso encuentroNarra David De María Ramírez–Mi amor, sabíamos que eso te iba a pasar y ya nos lo había explicado la doctora Andrade, mejor platícame ¿Cómo te va aquí? – Me preguntó mi madre – Espero que ya te hayas integrado a algún taller o algo así.Las actividades todavía no comenzaban para mí, debía pasar un tiempo prudente de por lo menos 30 días para que pudiera ingresar a algún taller, solamente me la pasaba leyendo los libros que me había mandado mi consentida y eso me calmaba en los momentos que lograba concentrarme.–No madre, aún no puedo tomar talleres hasta que lleve un mes aquí y no me sienta tan ansioso por consumir. Me está costando mucho, es más difícil de lo que pensé. Tú te ves muy bien, ¿Qué has estado haciendo?El estar platicando con mi madre me iba a despejar de todos esos malos pensamientos que tenía, de querer consumir aunque fuera una cápsula o de quererme salir de la rehabilitación y qué mejor que ella me platicara de cómo se estaba sint

Capítulo 167. Malas noticias, parte 1Narra Alondra Ferreyra PérezSentía remordimiento de haberme ido así al Tec, dejando a Simone molesta conmigo y a mi pobre Batman que tenía que estar ahí penando y preocupándose por Nacho, no podía creer aún que eso hubiera pasado y como en un segundo las cosas cambian ya sea para bien o para mal como en este caso.Tomé mis clases, muy preocupada y cuando salí llamé a mi Batman para preguntar por Nacho, porque sé que él seguramente no me había mandado mensaje para no entorpecer mis clases. Nunca olvidaré cuando mi Batman tomó la llamada, estaba demasiado preocupado.–Mi Batman hermoso – Dije apenas lo escuché – Amor, no he podido ni estar a gusto en clases, solo vine porque tenía que venir. Quisiera saber ¿Cómo salió Nacho de la cirugía?La había pasado muy mal durante todo el día en el Tec, tenía que saber lo que le había pasado a Nacho en la cirugía y me daba mucha pena haber dejado a mi Batman en el hospital esperando a que saliera su primo.–A

Capítulo 168. Malas noticias, parte 2Narra Alondra Ferreyra PérezNo podía estarlo, nos subimos al auto y nos fuimos directamente al hospital, yo quería ver a Simone y saber que ella estaría bien, era de verdad que yo no hubiera soportado que nada malo le pasara a mi amiga. Me moriría si eso pasara, más aún sabiendo el pleito que pasamos por mi culpa y por mi forma tonta de ser. Axel y yo llegamos rápido al hospital y no lo esperé ni a que bajará él del auto para que me ayudara a bajar, corrí hasta llegar a la sala de espera en dónde me encontré con los brazos de mi Batman.–Alondra, mi amor. No llores, preciosa – Mi Batman me consolaba – Esto que pasó con Simone, ha sido un accidente.–Lo sé, pero yo influí por haberle hablado como le hablé – Me recriminé – No sirvo para tratar con gente, no trato bien a nadie. Soy una estúpida.Mis palabras siempre dañaban a los que estaban a mi alrededor, por no pensar antes de abrir la boca.–No vuelvas a decirte así, mira ahí viene Axel y tambié

Capítulo 169. Un visitante sorpresaNarra David De María RamírezPasaron varios días más en ese lugar que parecía una cárcel para mí, días en los que leí más que nunca en mi vida. Me terminé los libros que me mandó mi consentida y después, me sentí un poco menos mal cuando empezaron a buscar en ese lugar, a personas responsables de la biblioteca para acomodar libros y coordinar lo de los préstamos y hasta había un club de lectura de suspenso al que me uní cuando cumplí mi primer mes en ese lugar, algo que pensé que nunca iba a llegar, pero llegó.–David, te tengo una buena noticia – Me dijo la doctora Andrade – Como has cumplido bien con tu primer mes de tu rehabilitación, hoy tienes a alguien que vino a verte con tu madre.Estaba tan metido en todas las actividades del centro de rehabilitación, que ni cuenta me había dado que ya pasó todo un mes, en verdad llegué a pensar que no iba a durar nada por toda la presión que yo mismo me ocasionaba.–Muchas gracias, doctora. Siendo sincero,

Capítulo 170. Razones para entretenermeNarra David De María RamírezYa somos muy mayores para jugar a los carritos, nos gustaba dibujar y lo que son las cosas, él por esa pasión por el dibujo terminó convirtiéndose en un diseñador gráfico, no tenía muchas ideas así que me di por vencido.–Me rindo, colega – Dije derrotado – Nos gustaba hacer muchas cosas de niños, pero aquí no puedo jugar con carritos, se reirían todos de mí por la edad y no se me viene a la mente lo que pueda ser.Habíamos hecho muchas cosas, juntos, pero no se me venía otra a la mente que lo de los carritos, y para eso ya no estábamos,–No sé qué voy a hacer contigo, colega – Dijo Sabadelle y sacó una bolsa enorme con dos cajas gigantescas – Ahí tienes 10,000 razones para recordar lo que nos gustaba hacer.–Bien, voy a ver lo que es – Tomé la bolsa y saqué las cajas – Olvidé eso, que nos gustaba mucho armar rompecabezas.Estos rompecabezas me iban a mantener más ocupado que todas las actividades de la clínica, me d