Dante¡M*erd*!, solo quería asustarla y que ella ceda pero es tan terca.Toda una principessa de la mafia, es digna de ser mí esposa, con muchas más ganas no la dejaré, nunca tendrá su libertad.—Jefe, nos vamos, dejó aquí a algunos de los hombres, dice que han visto a unos pocos hombres de Kray, rondando la clínica, quizás están viendo si Allecra está desprotegida o puede ser que planean algo— me hace saber Emilio.—Está bien solo a los mejores los quiero aquí, Leo está con su hermana en su habitación, cuidándola hasta que se despierte, lo cual es irónico porque debo acabar con su vida, quiero a un hombre que ingresé como resguardo en la habitación de mi esposa cada vez que entren las enfermeras o los médicos, no quiero arriesgarme que le hagan algo a ella o a los bebés—paso una mano por mi cabeza, cansado y cabreado de todo esto.—¡Entendido!, dejó a la Srta. Isabella instalada y luego regresó de nuevo acá jefe —se gira y se va con una Isabella desmayada en sus brazos.Otro punto q

AllecraLlegamos a casa, Dante simplemente me sacó de ese horrible lugar no quería estar más ahí, no me sentía segura.Los doctores le dijeron que había que firmar papeles a lo que él solo los apuntó con un *rma y les dijo que cerraran la boca si no querían tener una bala en su cabeza.Nunca me dejó en todo momento mientras nos íbamos de ahí, yo solo me deje cuidar de él, aunque lo odio por lo que le hizo a Isabella, no tengo más opción por ahora.Ya en mí habitación, me saque esa ropa horrorosa, me cambie por una de mis batas maternas de seda, dejo mi cabello suelto, me acuesto mirando el techo de mi habitación, pensando en todo lo que me dijo Luciano.¿Será que algún día podré vivir libre, sin que nadie asegure ser mi dueño o no tenga que ser intercambiada por negocios?Mis manos van por instinto hacia mi abdomen hinchado, no sé si quiero que salgan o se queden por siempre ahí en un lugar más seguro.¿Serán siempre un objetivo para llegar a Dante o a mí?Maldit*s hormonas, no puedo

DanteVeo todo rojo siento estás ganas intensas de hacerle mucho daño, de hacerla sufrir ella siempre saca lo peor de mí, yo vengo a querer tener una especie de tregua con ella, pero ella lo tira por la borda en segundos siempre.La culpa la tengo yo por querer tener algo más que solo un arreglo de conveniencia como quedamos desde un principio, aunque los niños no fueron planeados, pensé que iba a sentir un total rechazo hacia ellos de forma definitiva debo admitir que cuando me enteré de su embarazo, al principio sí le dije cosas feas y me arrepiento tanto ahora, que nunca me va a alcanzar la vida para poder pedirle perdón por haber hecho eso, al pasar los meses asimile la idea que iba a ser papá y se sintió tan bien.Estoy agradecido de no haber insistido en el tema de interrumpir su embarazo, me hubiera arrepentido toda la vida.—¡Cierra la boca por un momento o no respondo de mis actos!, siempre dices cosas como esas— la suelto algo brusco.—Déjame sola quiero descansar, quizás cu

AllecraDante cumplió con su palabra y me dejó hablar con Isabella, está paranoico con lo que me puede pasar si salgo, así que la doctora viene a casa cuando es necesario, en un par de días a más tardar los niños nacerán.Estoy muy ansiosa, no puedo dormir aunque ya hemos tenido sexo intenso en estos días, hemos optado por otras alternativas como el sexo oral.Está logrando meterse bajo mi piel, estoy llegando a sentir cosas, no le quiero poner nombre a esto, pero no puedo olvidar cómo era él desde el principio, cómo se enrollaba con una mujer tras otra en esta casa, sin importarle sí eso me podía molestar o no.Aunque no sentía nada por él cuando decidimos casarnos, ahora que siento estás cosas que ni yo misma tengo claro que es, me molesta, me llena de un enojo saber que lo que me hace a mí y que la forma en que me besa, se lo hizo a esas fulanas.Me dan ganas de golpear su cabeza con cualquier cosa que tenga a mano.Se ha vuelto tan atento, está pendiente de mí, ya no duerme en su

AllecraDios mío esto es lo más horrible que he tenido que experimentar en toda mi vida, no sé cómo algunas mujeres pueden tener más de uno, yo solo quiero que todo esto acabe.Agarro la sábana con mucha fuerza con ambas manos, retorciéndome del dolor, no creo poder soportarlo más, mi cuerpo no lo soporta más, cuando llegó la doctora me dijo que tenía apenas 4 cm de dilatación que debía esperar a tener 10 cm, me reí, sí tonta de mí por haber hecho eso, pensé que sería fácil como no me dolía mucho, me dije:Allecra, esto es pan comido, no hay nada de qué preocuparse. Qué equivocada que había estado, ¡Esto es una mierda!, quiero golpear a todo el que me pone una mano encima, a todo el que me habla, solo me irrita más que lo hagan.Maldito Dante, cuando venga a buscarme porque quiere tener sexo, no lo dejaré hasta que tenga unos 3 condones puestos encima y aún así creo que no lo dejaré.No puedo dejar de llorar y gritar, siento que algo se me está desgarrando por dentro, es horrible.¿A

Hago nuevamente lo que hice antes con el primer bebé, pero me sigo sintiendo mal, cuatro veces más tuve que pujar y la doctora me dice que la bebé al fin ha nacido, pero no escucho llanto alguno.Mi corazón se detiene, entro en pánico, eso no me dice nada bueno, olvido lo que estoy sintiendo y me centro en lo que está pasando.—¿Qué pasó? ¿Ya nació?, no escucho nada, no está llorando. ¿Por qué no llora?— la doctora no me presta atención y una vez que le corta el cordón a la bebé, se la lleva rápidamente a la esquina donde están las enfermeras y la pediatra que como tampoco hacía ruido alguno olvide su existencia.Escucho que hablan entre ellas, Dante se acerca a ellos con el bebé en brazos. Está enojado y asustado en partes iguales, la Dra. Windsor, regresa a mí lado a terminar de atenderme, pero eso no me parece importante en este momento.Quiero gritar que me presten atención pero lo último que recuerdo es un Dante aterrado y una doctora aún más.Todo se vuelve negro, pierdo el con

Allecra7 meses después:Dante está muy raro, misterioso, a veces hasta algo mal genio, casi como si hubiera vuelto a ser el mismo de antes.Nunca dejé que esos momentos de paz que tuvimos cuando nacieron los niños y hasta ahora, me hicieran bajar la guardia y pensar que podíamos vivir bien y juntos para siempre, no nunca puse mi corazón en ello.Ahora ellos tienen 7 meses y me dejan realmente agotada, a veces no tengo tiempo ni para mí misma.Pero siempre aún así él encontraba momentos para estar conmigo, teníamos sex* caliente y a veces hasta puedo llegar a pensar que hacíamos el amor era tan dulce y tierno conmigo aunque nunca lo escuche decirme que me ama, busqué un implante que no me diera problemas de olvidarme tomar las pastillas o aplicarme las inyecciones el día que eran, me ha funcionado muy bien.¡Estaba todo bien!, pero de unos meses para acá todo se fue al demonio, de la noche a la mañana él cambio o de pronto alguien más es el responsable de ese cambio.Debo saber que s

Apenas llegué Dante a casa hoy, debo hablar con él, no es que vaya a pedir permiso simplemente debo comunicarle lo que pienso hacer con mi vida.Si no entiende pues bien puedo negociar, unos cuantos de mis territorios que se niega a devolvérmelos, eso es otro problema que no he podido arreglar.Después de la llamada de ellos, seguí con la rutina de los niños, Isabella me ayudo como siempre hace cada vez que puede y está en casa conmigo, después de atender a los bebés y dejarlos durmiendo en su habitación. Isabella ofreció quedarse a dormir ahí pero le dije que no, ella debe de disfrutar su adolescencia, no cuidar bebés, que vaya a su habitación a dormir tranquila.Estoy dando vueltas y vueltas en la cama sin poder dormir, ¡Maldito Dante que me acostumbro a dormir con él!Me levanto de la cama, me pongo mis pantuflas y salgo de mi habitación por costumbre voy a la de los bebés, los reviso, están dormidos como los dejé, cierro con cuidado y me dirijo a la habitación de él.Voy a ver si

¿Entonces todo fue mentira?, él fingió sentir algo por mí todo este tiempo.¿Acaso es de piedra?¿No siente nada ni por los niños?, son sus hijos por el amor de Dios.— Hola— lloro más fuerte no lo puedo evitar, quiero calmarme un poco para poder hablar pero me cuesta mucho.—¿Allecra?, ¿Eres tú? ¿Qué sucede estás herida?, ¡Háblame no me asustes así, j*der!, creo que me va a dar algo sino empiezas a hablar— trato de controlarme para poder hablar y que sepa que es lo que me pasa.Una vez que lo consigo le digo que me dejé de gritar, me aturde más, no logro poder pensar con claridad.—¡Me mintió!, él me mintió nunca cambio y sabes que es lo peor, quiere matarme y quedarse con los bebés, mis bebés. Tengomucho miedo ayúdame Gabriel, ayúdame a escapar de él—soy patética lo sé, pero pensé que tenía todo bajo control, pero que equivocada que estaba todo esté tiempo.¡Me enamore de él sin darme cuenta!, no quería aceptarlo pero parece que es así. ¡Est*pida ,est*pida Allecra!, no aprendiste n

¡Rastréame ahora, Perro mentiroso!En el portón principal hicimos lo mismo, nos dejaron pasar, el miedo que sentía fue disminuyendo a medida que avanzamos a nuestro destino.1 hora después nos detenemos en una casa elegante, pero se mezcla bien con las demás, nada que llame la atención. Apenas estamos bajando, se abre la puerta, sale Gabriel, más guapo que nunca.Pero mi cabeza no está para eso, tengo el corazón herido y estoy muy destrozada.—¡Principessa, me has hecho mucha falta!, ven aquí— me abraza con cuidado de no lastimar al bebé y besa mi frente.Está sensación de seguridad era lo que extrañaba y me hacía tanta falta, las lágrimas caen por mis mejillas y él gentilmente las quita.—Shhh ya todo paso, ahora vas a estar conmigo no volverás a llorar más, ¿Quién es este pequeñín tan serio?— lo trata de tocar pero mi bebé se aleja de él, es gruñón y no le gusta estar cerca de los desconocidos, no puedo evitar compararlo con su padre.¡Basta!, Allecra su padre no está muerto, está v