NARRA KENDRICK Llorar, dicen que los hombres no lloran, yo no lloro pero, qué creen aquí me ven, llorando con mi hermana maddy viendo el Titanic aún no entiendo esa película, es que el podía subirse con ella en la cosa esa entraban los dos por amor a dios, ni siquiera sé porque maddy ve esa película tan cursi. Les cuento algo, después de la muerte de Andrés y alessandro decidí venir a vivir con mi madre y Nicolás, maddy había caído en cama por la muerte de los chicos aun ha sido difícil para ella poder salir de casa, no ha dejado el cuarto de andrey, noah había salido bien en la operación y claro después del secuestro, aún no entiendo cómo lo sacaron del hospital. Lo importante es que estoy aquí con mi familia mi nueva familia. —¿qué piensas.? - dice mi hermana lanzándome un cojín—En tu cara de llorona. Ella bufa y arruga su frente.—Esta película me hace llorar mucho… Además… Los extraño a ambos. Yo también… Suspiro. —Vamos maddy ya hemos hablado de eso. Ella se acerca y se
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