El ver a su hermano pelear, era algo normal para ella… lo mismo con el mafioso, pero en ese preciso momento la cabeza le estaba empezando a doler y en ese preciso momento lo único que deseaba era que todos guardaran silencio ya que no soportaba su cabeza.El grupo de mafiosos estaba siendo demasiado ruidoso, más de lo que soportaba y lo peor es que Antonio igual estaba ayudando a su malestar por el ruido y la destrucción que su ridícula pelea generaban; por lo que, sin dudarlo, ya tenía sus tonfas en sus manos y estaba lista para ir a callarles, así que empezó a acercarse a ellos de forma silenciosa, pero entonces sintió como alguien la tomaba del brazo.Por su parte Akira estaba concentrado en su batalla contra el rubio platinado, debía reconocer que era fuerte, pero en esos momentos no se daría el lujo de ser derrotado porque no permitiría que ese sujeto se quedara con su linda pelinegra y su hijo…Algo similar le ocurría con Akira, ya que le molestaba un poco, pero debía admitir qu

En esos instantes se podía escuchar claramente el sonido que producía la pelea de ambos líderes en esos momentos provocando que hasta el mismo suelo y techo del lugar temblaran ante la fuerza que estos empleaban en su actual combate.- Señor Renato, creo que exagero un poco esta vez – comento algo preocupado Leonardo mientras miraba de reojo la gran puerta de madera de caoba que lo separaba de su amigo y jefe, ya que estos habían salido acompañados por todos los hombres de Limit con un solo propósito: escapar de la ira bien justificada de su jefe.- Tranquilo, estoy seguro que sabrá arreglárselas por su cuenta – opino de forma tranquila mientras metía sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón y empezaba a caminar por el pasillo.- Pero… - quiso oponerse Leonardo.- ¿El que se maten entre ellos? también es parte de tu plan – pregunto algo molesto Keitaro, provocando que el otro detuviera su andar y le mirara a ver de reojo.- Dudo que ambos lleguen a matarse de forma literal ya

Después de que el acuerdo fuera firmado y pacto, ambos líderes se reunieron con sus subordinados y amigos para informarles sobre el nuevo acuerdo que tenían, aunque claro que esto causo algunos desacuerdos por parte de ambos bandos, pero después de unas palabras de Renato todos quedaron callados y aceptaron la alianza.De eso ya habían pasado una semana, al menos Antonio ya no tenía en sus preocupaciones futuras recibir algún ataque sorpresivo de Limit o de alguna otra organización que quisiera ir contra ellos, pero en esos momentos se enfrentaba a un gran enemigo… y no era su papeleo habitual…Por seguridad de los 3 futuros herederos se acordó que Lucia y Sylvana permanecieran en la mansión Cosa Nostra, donde estarían vigiladas y tanto los miembros de la familia Ricci como algunos hombres de confianza de Dante y Franco ayudaran a reforzar la seguridad, sin levantar sospecha alguna… aunque nadie se imaginó que un nuevo enemigo apareciera para perturbar la paz y felicidad de los 3 capo

La situación en la mansión Cosa Nostra había regresado a la normalidad… bueno lo normal acostumbrado para los habitantes del lugar, ya que ahora con las 3 embarazadas, los guardianes permanecían más tiempo en casa y era raro que salieran a alguna misión larga o que tardara más de 3 o 4 días.Uno de los cambios que se hicieron notorios con la llegada de las otras familias a la mansión, fue el aumento de empleados, especialmente en el área de la cocina, los cuales ayudaban a aligerar la carga del cocinero principal de la mansión ya que, por órdenes de Antonio, ahora él y su equipo estarían dedicados a complacer a cualquier hora los antojos de su esposa y de las otras dos embarazadas.Por obviedad… por más que se intentó mantener el secreto no se pudo evitar que la noticia se filtrara y todos se enteraran de que las esposas de las familias: Cosa Nostra, Camorra Napolitana y Benedetti estaban embarazadas, lo que implicaba que ellos ya tenían heredero en puerta, asi por obviedad se aumentó

Justo cuando estaba sacando su teléfono noto que este empezaba a sonar el teléfono móvil, notando que era su amigo quien le marcaba así que sonrió.- Me leíste el pensamiento, justo te iba a marcar.- ¿Eh? ¿en serio? ¿paso algo en su salida?- Nada malo, solo que alguien me recordó que debo consentir mucho a MI amada – hablo alzando un poco la voz, pero noto que los hermanos le estaban ignorando, provocando que tuviera un tic en el ojo.- ¿Necesita algo para ella?- Si quería que le pidas a los cocineros que me hagan el mejor surtido de postres que se les ocurra para ella.- Hmm… entiendo yo se los pido.- Muchas gracias.- Si, de nada.- Oye recuerda eso – se escuchó otra voz en la llamada.- ¿Estas con Yumiko?- Ya sabe cómo es de persistente y molesto, pero tiene razón yo te llamaba para otro asunto- ¿Pasa algo? - Si vera es que… ash Yumi quédate quieto… - escucho que se quejaba el peliblanco.- Vamos Leo, yo sé que quieres – se escuchó la voz coqueta del otro.Ante ese comentari

Obviamente que la noticia sorprendió a más de uno ya que todos en secreto habían apostado sobre el sexo del bebe, donde el único ganador fue Renato ya que él había dicho desde el principio que serían gemelos y para molestia de todos los participantes tuvieron que pagar la apuesta y soportar que se burlara en sus caras.Por su parte Antonio se encontraba feliz y nervioso al mismo tiempo… y no era para menos, era verdad que la idea de un hijo le había emocionado diciendo que buscaría consentir a su “hijo” y evitar seguir los pasos de sus padres; los cuales a pesar de haberle dado algo de cariño, la mayor parte del tiempo lo ignoraban… pero ahora se sentía muy nervioso ya que eran 2 bebes… era obvio que asumiría su responsabilidad y ayudaría a Kyomi en todo, pero aun así algunas dudas estaban en su mente, en especial por el hecho de que la familia contaba con muchos enemigos…- Antonio - escucho que le llamaban, pero él seguía distraído mirando a la nada y girando su bolígrafo con sus de

Los días en la mansión empezaron a tornarse algo movidos y eso era debido a que ya estaba más próxima la llegada del primer infante, pues Sylvana ya contaba con 8 meses de embarazo por lo cual todos estaban muy al pendiente de la rubia ya que al estar en la recta final no sabían en qué momento podría empezar con su labor de parto, aunque Alexandro ya les había aclarado que un falta unas semanas para el gran día, pero Franco ya se encontraba muy nervioso y ansioso… y las falsas alarmas de la rubia empeoraban su estado de ánimo.Dante aún se encontraba algo tranquilo, aunque tampoco bajaba la guardia ya que Lucia poseía 7 meses de embarazo y no la debajo sola por más de 5 minutos… lo cual desquiciaba a su bella esposa, la cual terminaba golpeándolo o atacándole con su tridente para que dejara de atosigarla, donde siempre terminaba por ir a refugiarse con su hermana.Por su parte Antonio estaba calmado respecto a ese tema ya que Kyomi apenas había cumplido los 6 meses, definitivamente es

Los días seguían transcurriendo de forma ligeramente tranquila, ya que a veces todos se sorprendían de las ocurrencias que el trio de señoras hacían, producto de seguir sus lados impulsivos provocados por el embarazo… según sus propias excusas.Era un viernes por la mañana, ese día las cosas transcurrían de forma normal-atareada para los habitantes de la mansión ya que en unos días Antonio tendría que asistir a una reunión con otros líderes de las otras mafias para debatir algunos puntos importantes y crear posibles alianzas. Pero como era normal, debían ir preparados con toda la información posible que existiera de los demás invitados para saber cómo moverse y comportarse en esa reunión, por lo cual la mayoría de los guardianes estaban en una misión, donde solo Leonardo y Yumiko se habían quedado en la mansión.En esos momentos el castaño se encontraba en su oficina muy concentrado al mismo tiempo que escuchaba atentamente a su mano derecha, quien le estaba pasando el reporte de cada

Era una noche muy agitada y eso no se debía al hecho de que en esos instantes se hubiera desatado una tormenta afuera… si no, por la tormenta de emociones que se vivía adentro de la mansión Vongola… ya que nadie se esperó que algo así pasara.Lo que había comenzado como una mañana tranquila se convirtió en un tornado de caos.El día era precioso, el cielo estaba despejado y el sol brillaba e igual había una brisa agradable. Todos se encontraban ese día en casa, incluso Akira estaba de visita.Pero en ese momento el centro de atención era cierta rubia algo despistada, ligeramente torpe y medio bipolar, ya que en esos momentos contaba con los 9 meses de embarazo por lo cual todos estaban pendientes de ella por cualquier síntoma. El más nervioso en esos instantes era cierto pelirrojo, ya que había hecho a un lado sus deberes como líder encargándole esas tareas a su hermana mayor Marcella, la cual acepto por el simple hecho de que Franco ya no parecía concentrarse en sus deberes y prefiri

Después de una semana del nacimiento del pequeño Kaito, Franco y Sylvana se regresaron a la mansión Camorra Napolitana, pero no porque ellos quisieran si no porque apenas a tres días de su nacimiento Marcella fue a visitar la mansión junto con los demás guardianes del pelirrojo y por obviedad su visita realmente fue para ir a buscarlos ya que ellos deseaban pasar tiempo de calidad con el nuevo integrante de la familia y para que Franco se pusiera al corriente con su papeleo.Por otra parte, Lucia ya no toleraba ni soportaba a Dante ya que se había vuelto totalmente paranoico y posesivo… por lo cual decidió vengarse de él y en ese momento se encontraba observándolo de forma divertida, ya que en esos momentos estaba alterado y corriendo de un lado a otro por el jardín de la mansion. Ya harta de que Dante no la dejara en paz, simplemente busco esconderse, después de pensar un poco… encontró el plan perfecto: busco persuadir con coqueteos y mimos a su amado esposo, para que fuera a busca