John me estaba besando con intensidad, explorando mi boca, sus manos recorriendo todo mi cuerpo, su beso era posesivo y urgente, jadeé con el peso de su cuerpo sobre el mío, mis manos acariciando su cabello, él se levantó un poco y retiró la llevaba puesto el abrigo, luego la camisa, luego lo admiré, a la luz de las velas de esa habitación, su pecho definido, las duras líneas de músculo en su vientre, no había ni un gramo de grasa en él, era todo músculo, su anchos de hombros y fuerte, me rodeó con sus fuertes brazos y yo separé más mis piernas para que se acomodara, y eso fue exactamente lo que hizo, se acostó y me miró. Su rostro todavía estaba lleno de deseo, y todo mi cuerpo ardía por él, sabía que podía oír mi corazón, pero no me avergonzaba de que supiera cómo hacía que mi corazón latiera salvajemente en mi pecho, no podía huir de él. estos sentimientos nunca más, ni tampoco el comandante, porque de alguna manera sentía que nuestros corazones estaban destinados a encontrarse. J
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