Casi seis meses han pasado desde que me marche de la casa, cada día mi panza crecía y crecía a pesar de tener a mi hijo, mi abuela y mi mejor amiga de infancia, me sentía muy sola, no había día o noche que no llorará la falta que Alan me hacia. Muchas veces estuve a punto de llamarlo y decirle que venga por mi, le permití a Alan solo llamar para que hablara con Liam Durante un mes entero Liam lloraba por ver a Alan y de igual manera yo también lo hacia, me partía demasiado ver a mi pequeño llorar por él, se ha apegado demasiado a Alan y no lo culpo, él lo estuvo criando con si fuera de él, la nana de Alan es la única a la que le permití venir a verme, es la única persona que puede hacerme tranquilizar hablándome de Alan me traía grabaciones de Alan y cartas que Alan me escribía, durante todo este tiempo el único contacto que ha teni
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