_¡Ay Dios mío, voy a llamar a una ambulancia! -gritó la madre de la víctima.En la iglesia había conmoción por lo sucedido y la risa incontrolada de Rossetti dominaba en el lugar, poniéndole los pelos de punta a los presentes._ ¡Tienes lo que te mereces! ¡Ahora sabes lo que se siente estar en desventaja!_ Ya veremos cuanto te dura la suerte -le dijo Menzies, quien la hizo soltar el arma y la sujetó con más firmeza de la necesaria, haciendo que se quejara de dolor. Eso es, sigue resistiéndote, así dolerá mucho más.Con cada segundo, los invitados estaban más tensos, preocupados y asustados; pero los más allegados eran quienes estaban más angustiados que cualquiera._ ¡Voy a llamar a la policía!_ ¡Buena idea Ivonne!_ ¿No sería mejor encargarnos personalmente de ella? -dijo Robert._ ¡Ja, ja, ja, no me asustan! ¡Ninguno de ustedes! ¡No me importa lo que me hagan, ya cumplí con mi cometido! ¡Esa perra me robó el amor del hombre de mi vida! ¡Ella me quitó a mi Rodik, así que ahora jam
Leer más