A la mañana siguiente Alexandro despertó temprano, el CEO Oliver Rodríguez no se miraba por ningún lado— Por fin se largó — pensaba el Alfa, Alexandro dió un vistazo a su luna, ella seguía dormida pero ya tenía color en su hermoso rostro, cómo si supiera qué la estaban observando Mia abrió los ojos poco a poco, encontrándose con la penetrante mirada gris de su lobo la mujer embarazada comenzó a recordar cómo flashes el celo que pasó con su ex novio Oliver Rodríguez— Alexandro yo... — Mia dejó escapar lágrimas de dolor, de culpa, sabía lo posesivo y celoso qué era su amado y ella había hecho el amor con Oliver sin poder evitar sus instintos y el llamado de su corazón — Te he e traicionado, ¿ya no me querrás verdad? — ella estaba muy triste más aún por qué no se sentía arrepentida — ¿Estoy aquí no es así? Mia trató de levantarse pero aún estaba un poco mareada — ¿Qué haces mi luna? !estás muy débil aún, tienes qué cuidarte mucho por ti y por nuestro cachorro! — el Alfa Alexandro

Mia no quiso ir en el asiento de atrás con Alexandro, le pidió ir al frente con Oliver así ella estaba sola y tranquilaEl Alfa iba furioso, culpaba a Rodríguez por el miedo que ahora su luna sentía por él, pero lo qué en realidad pasaba es qué las hormonas de Mia estaban super descontroladas por el embarazo, eso la tenía mas sensible Llegaron a la mansión y la bella luna bajó de inmediato del coche, ella echó a correr a la habitación, Alexandro tenía dos dedos en el puente de su nariz, se sentía ya sin paciencia y muy frustrado El ahora vampiro Oliver gritaba:— !No corras Mia, estás embarazada es peligroso! — Cómo si lo presintieran en un escalón Mia se resbaló, ella no pudo sostenerse del barandal, su caída era inminente, pero el vampiro Oliver se movió a velocidad sobrenatural y la tomó en su brazos— Cariño, deja de ser tan obstinada, ¿qué no vez qué nos duele tu rechazo? — Oliver la miraba fijamente con sus hermosos ojos verdes, el vampiro dejó un suave beso en los carnosos lab