●Luke:Ahí estaba yo, viendo como el carro se aleja con Ximena en el, yo maldiciendo con todo lo que tenia por el simple hecho de no haberlo matado cuando pude. Siendo sincero, yo si lo quería matar pero mi padre me dijo que no porque se suponía que él no sabia nada del trabajo de su padre.Me siento como estúpido, solo viendo hacía enfrente el carro alejarse rápido, me quede ahí con mi mirada fija y me hubiera quedado así si no fuera porque escuche a alguien llorar.—Hey tranquilo, todo va a estar bien.—Vi al hermano

 ●Ximena:Estaba en el carro del Antonio amarrada esperado que el trayecto sea muy largo pero por la velocidad que va, creo que llegaremos muy rápido. Me bajó del carro cargandome y me llevó a una habitación de arriba. ((Segundo piso, una ventana, no es tan alto, no creo que te mueras de caída.)) Pésima idea. —¿Por qué tan callaba preciosa? —esa palabra solo me la puede decir Luke y si mucho. —¿Qué quieres que diga? &

 ●Luke:Me alegro que Ximena haya aceptado el venir conmigo a dejar a su hermano, esté va a ser un gran paso pues aunque no los vaya a ver estará en frente de su casa, casa que no a pisado en tres meses. Sí, ya han pasado tres meses desde su secuestro. Ximena me ha hecho ver las cosas diferentes. Todo esto del secuestro y las chicas lo veía solo como un juego pero no fue así, me termine enamorando de Ximena. Es una chica increíble que tiene una personalidad fascinante, ella es increíble. Cada día que estoy con ella me hace feliz y me da una muy buena raz&oac

 ●Ximena:Estamos a solo unas calles de entrar al vecindario donde se encuentra la casa y estoy muy nerviosa. Me sumergí en mis pensamientos, tanto así que deje de escuchar a los chicos. ((No era como que les estuvieras prestando atención.)) Eso sí. Eran tan fuertes mis pensamientos que no me di cuenta cuando ya habíamos llegado, ya estábamos estacionados enfrente de mi casa. ((De la casa.)) Si eso. <

  ●Ximena: Ahí estaba yo, en la oficina de Eric, sentada frente de él. Ya le he contado lo que pasa pero tampoco he recibido muchas respuestas y está bien, no es como que él tuviera que responderme algo que debió hacerlo Luke, él solo me escucho y al final de que termine de contarle solo me abrazo.   —Luke es un buen chico pero a veces no toma la mejores desiciones, se lo doloroso que es cuando una persona no confía en ti pero tienes que demostrarle que tú lo haces, y no sólo que confías en él sino también en ti misma.—   —Ese es el problema Eric, yo confío en él y él lo sabe pero el no confía en mí...—   —¿Y tú confías en ti? —cuestionó.   —Bueno... no mucho.—   —¿Confías en las decisiones que tomas?—   —A veces...—   —¿Como quieres que alguien confíe en ti, sí tú misma no confías en ti?—   —No l

●Luke:No quise decirle a Ximena que por las noches cuando salgo voy a un lugar donde participo en peleas ilegales de boxeo y que esa es la razón por la que llegó a casa golpeado. Empecé a ir a ese lugar después de la muerte de mi madre, cuando juré con mi hermano y mi padre que vengariamos su muerte. Una vez que empecé ya no pude dejar de ir, se volvió un hábito, un mal hábito lo reconozco. Mis hermanos y mi padre siempre intentaban convencerme de que dejará de ir pero como no les hacía caso dejaron de insistir. Mi hermano Iván es el único que hasta el día de hoy sigue insistiendo en que deje de ir. Cuando Ximena llego a mi vida dejé de ir por un tiempo pero después no pude resistirme y salí a pelear y ya que ya llevaba mucho sin pelear me fue algo mal, esa fue la razón por la que esa madrugada llegue tan mal.

●Ximena: Estoy en mi nueva habitación terminando de desempacar y guardar toda mi ropa junto todas mis pertenencias para luego bajar con Mariangel a ver que hacemos, ya termine así que aquí vamos.   —Hola Ximena.—   —Hola Mariangel, ¿qué haces? — le pregunte pues parecía una vieja chismosa viendo desde la ventana o como si ella estaviera esperando a alguien.   —¿Recuerdas a Max, Toby, Violet, Mac y Karla?—   —Como olvidarlos, ya han de estar bien grandes.—   —Lo están, desde la última vez que los viste y que me entregaste a Max.—   —Si, cuando tuve que entregartelo porque ya no podía cuidarlo.—   —Si, pero ellos ya están muy grandes y hermosos.—   Yo solo asentí pues no podía confirmarlo pues todavía no los veía, ah claro, de quien estamos hablando son de los perros de Mariangel, todos ellos lo son excepto Max,

 ●Ivan:Ya han pasado dos meses desde que Ximena se fue de la casa y las cosas no han mejorado para nada, papá no nos dice nada, pero estoy seguro de que él sabe dónde está Ximena. Luke no deja de salir todos los días a buscarla por todo el estado con la esperanza de encontrarla por cuestiones de suerte. Me estoy dirigiendo a la oficina de mi padre, ya estoy cansado de que Luke salga todo el día buscando a Ximena sin respuesta alguna de ella. Éste ya salió para buscarla como todos los días y no volverá hasta dentro de muchas horas. —¿Dónde está? —sin más rodeos hablé dirigiéndome a mi padre al entrar a su oficina. —¿Dónde está qué? —hizo cara de confundido, pero estoy seguro de que sabe a qué me refiero. —&

  ●Luke: Fui un maldito estúpido. Nunca debí haberle dicho todo eso, lo único que ella hacía y que estoy consciente de que me lo dijo era preocuparse por mí y yo lo que hice fue alejarla con mis palabras y mis estupideces. Si esa noche no hubiera salido a descargar todo mi enojo en ese saco de boxeo ella probablemente seguiría en casa, no se habría ido y pudimos haber hablado, pude haberme atrevido a de decirle lo que hacía, pero no, eso no paso, yo me fui y cuando regrese ella ya no estaba.   Su partida no sólo se la llevo a ella, se llevó el amor, la alegría, el cariño, la diversión, la felicidad y sobre todo mi corazón. Con ella se fue toda felicidad que había conseguido en estos meses por ella. Ella me alegro mis mañanas, mis tardes y mis noches, todo con una simple sonrisa.   Fui yo quien la alejo, fui yo quien la hizo sentir así, fui yo quien la daño, pero quiero ser yo quien la cure, quien esté en sus mejores y pe

  ●Mariangel: Hace meses note que Ximena había bajado mucho de peso, y se estarán preguntando ¿Qué hay de malo en bajar de peso? No hay nada de malo si tienes un control de éste. Ximena es una joven muy delgada, no tiene necesidad de bajar de peso, ella no hace nada de ejercicio, el único ejercicio que hacemos es caminar al trabajo y yo lo he hecho durante más de dos años y no he bajado de peso.   Después note como Ximena comía menos, ahí estaba la respuesta a su pérdida de peso. Sus ojos se notaban cansados y muy pero muy rojos. Las dos tenemos turnos de día completo en el restaurante, pero lo que le quedaba de día y noche la pasaba en su habitación y de ahí no salía. Esto se está saliendo de control.   Max durante todas las noches rasguña la puerta de Ximena para que esta le abra, y ella lo hace, pero es al único que deja entrar. A mí solo me dirige la palabra en el restaurante y sí mucho pues ahora tenemos demasiado t