Emma...Llevamos un mes súper tranquilo, hemos estado unidos y eso me hace sentir totalmente, feliz, tranquila. Tenía que llenar archivos en el hospital y eso hacía, no había parado de mover documentos, hacer llamadas y de leer casos demasiado frustrantes, al menos, tengo de vuelta a mi secretaria, le he dicho que jamás tendrá vacaciones y menos si me toca una mujer como Taby; despistada, sencilla y dormida.Trabajé y como a las cuatro tomé un descanso, James llamó y le contesté.—¿Muy ocupada? —preguntó.—Algo.—Abre la puerta.Me levanté de mi silla y rodeé rápidamente el escritorio y caminé hacia la puerta, esperaba ver un enorme ramo de flores o algo gigantesco, pero, solo vi a mi gigantescamente guapo y candente esposo.Colgué la llamada y le ayud&eacu

Después del desmayo de Emma, se encargaron de atenderla, la policía encontró la última ubicación del jet en el que viajaba. Emilia se encargó de cuidar de su hija quién tenía la presión algo alta, para ella era fundamental tomar las medicinas del corazón y probablemente con el estrés se olvidó de ellas. Se mantuvo cuidando de ella y acompañándole hasta que despertó.—¿Es el cuerpo de James?—El forense del hospital está haciendo unas pruebas con el ADN con Julián—Dijo  Emilia—No voy a volver a comer en esa mesa, viste que asqueroso.—Sí, veo eso todos los días, —Emilia apretó la mano de su madre. —debes medicarte a tus horas.—Tenía la cabeza en otro lado. — Emma se sentó en la cama— ¿Y Cecilia?—Tranquila

Caroline caminaba detrás de mí, haciendo preguntas a las cuales creía merecer una respuesta, sin olvidarse que era mi vida, mi reputación, mi carrera y no estaba de humor para dejar algo de mí al aire después de ello. De mil maneras he intentado evitarla o callarla y no lo he logrado, después de su llamado de atención número un trillón decidí responderle.—¿Qué quieres entender, Carolina?— Emma, ¿por qué llorar te resulta tan malo?— No me gusta exteriorizar. Soy tu jefa te guste o no. Cuida como me hablas. — Me está cansado.— Tus pacientes te esperan.— Te pago por hacer eso.—Emma, necesitas terapia.— Lo tomaré en cuenta.Salí del hospital en dirección a la terapia que mi esposo había sugerido para mí. Mi madre se encargó de

.......James......Una semana sin Emma, ella necesitaba un descasar de tantos problemas y cosas decidió ir a terapia alimenticia es un retiro en que les motivan a comer y creo que realmente lo necesita.—Hermano.— Buenos días, Jack.— Somos solteros.— Estoy casado y tú tienes una pareja.—Semana de tiempo y espacio. —Nos metimos en el elevador. —En realidad ella pidió 4 semanas así que...— Debes reflexionar que tan importante es su relación para ti. — Me miro aburrido.— Al menos iremos a esa reunión de ex compañeros de colegio.— Tú y yo no hicimos el colegio juntos.— Ah, pero dice James y esposa y, tu esposa no está, por lo tanto, puedes llevarme. — Las puertas del elevador se abrieron, dimos un recorrido a través de la oficina, pedí

Un sonriente hombre se nos acercó saludó a James y a Leticia. — Quién diría que te casarías con la matadilla. — Vi a Leticia sonreír, y a James tensar sus músculos. — Leticia y yo, no estamos, casados. — dijo finalmente James. — Mi esposa es Emma. — Me señaló. — Lo siento señora. —James. — Interrumpió Sofía. — Ale, una gente y yo vamos para tu club, ¿Nos consigues una mesa? — Bien. — James sacó su teléfono envió un mensaje y le hizo una seña a su hermana. ............................. — Buenas noches, que duerman bien. — Gracias Leticia. — La m

¿Saben por qué los niños siempre están en paz con ellos mismos? ¿Será porque cuando lloran lo sacan todo? Todo lo sucio que no existe en su alma es porque el llanto se lo lleva.Después de cumplir cierta edad las personas aprenden a llorar en silencio, se guarda las  lágrimas sin dejar el sollozo del alma salir, sin dejar al cuerpo liberar la tristeza que en el alma se encierra será que esas lágrimas  nos convierten en fríos cubos de hielo, que no se derriten sino endurece cada vez que un momento difícil se aproxima, y cuando nos damos cuenta es muy tarde puesto que ese aire frío llega a nuestro pecho y nos amarga. Congela nuestras expresiones, nuestra sonrisa para dejar y provocar un sentimiento de frialdad a todo aquel que le atraviesa.Por otro lado me pregunto: ¿Será el llanto la liberación verdadera del alma?Lo es, esta mañana cu

.............Un mes después............Mi vida seguía sin rumbo, intenté fumar,  tomar, insultar y lo único que me dio señales de  estar viva fue llorar. Comía y me sentía mareada pero el infierno debe ser más aterrador que la vida.Recibí un llamado de Leticia, mi probable salida del dolor que estoy viviendo, si fuese con Philip terminaríamos enrollados y mi cabeza en peores problemas, ahora yo también estaría en ese círculo de infidelidad  ¿y qué pasaría después? ¿Haríamos matemáticas; menos mata a menos o menos y más menos?Estacioné  acomodé mi cabello, mi ropa y me dispuse a subir a su piso. Entré y había varias parejitas unas cuantas en su arrumaco y otras que querían acabarlos por ser felices. Una mujer no aguantó su ira y montó

La semana corre algo más lento cuando quieres ver a alguien, me guste reconocer o no, tengo una cierta necesidad por estar con James entonces ¿Es me vuelve masoquista? Y voy a ese pudo, cuando me agredía verbalmente o inclusive emocional era algo masoquista y ahora lo está haciendo de otra manera. Solía decirle a mis pacientes: "no lo dude, déjelo" y muchas respondían usted: "no ha estado en mi lugar, probablemente no haya encontrado el amor todavía", solo me acomodaba en mi silla y esperaba a la siguiente. Llegó un momento en el cual me harté de escuchar la sencilla respuesta que me daban esas mujeres, y renuncié a los casos de mujeres "agredidas" para dedicar a las "ninfómanas", me parecía un poco más interesante, al igual que ellos me gusta el sexo pero no muero si por una o dos noches no tengo un orgasmo, incluso no saldría en búsqueda de se

Ambas salimos del auto y entramos a mi casa y de ahí no recuerdo nada más que desperté en el sillón.—Tu presión está muy baja, debes comer mejor, ¿cuántas veces he de decirlo? y tú te quiero fuera de esta casa y este matrimonio hoy.—Señora, la que esta fuera aquí es otra.—A la que llaman cuando mi marido enferma es a mí, te quiero fuera de mi casa ya, hoy. —Espeté antes de salir de casa a vomitar, me monté en el auto y volví al hospital.Subí de nuevo por las escaleras, cuando entré James estaba con unos amigos, Jack y un par más que no conocía.—Señores, me permite, necesito hablar con Jack y James. —Ambos asintieron y se despidieron  de mi esposo. —La quiero fuera de mi casa o te vas con tu mamá.—Emma, Leticia no vive en mi casa desde la &

—No es bueno que bebas alcohol, ni fumes; tu cuerpo lo proclama.—Bueno, un café.—Tampoco, té.Entramos y metió unos polvos en agua hirviendo, alistó una tetera y las tasas las puso sobre una charola y se sentó a mi lado, no dije nada y ella tampoco, cuando el té comenzó a soltar su aroma lo puso en la tetera y subimos por unas escaleras, s a vista e mi casa es hermosa esta es aún mejor, tenía un jardín rodeándonos y la montaña se veía a lo lejos, me ofreció una copa de té y estaba en su punto de azúcar además de tener un exquisito aroma.—Té rooibos con un cubo pequeño de jengibre una tres cucharadas de infusión de manzanilla.—Empáqueme un poco. —La mujer sonrió.—Son antioxidantes y relaj