Lunes 20:28.
-¿sigues con el emprendimiento de libros?- observe a la señora Val sirviedo una copa de vino para mi.
Era la madre de Troy Val, un niño pijo que había hecho creer a su familia que tenia una relación estable. Los padres de troy era regliosos, creían en la familia y en la buena voluntad de dios. Cuando Troy me presente a su familia la primera vez, hace ya un año, su madre me había explicado la importancia del amor en la familia, la importancia de llegar virgen al martrimonio y como la felicidad invadía su cuerpo al ver a Troy conmigo. Lo gracioso de toda la situación era su hijo, había decidido contratar a una Scort debído a que sus padres no querían que vaya a una universidad tan lejos, creían que caería en las drogas, el alcohol y jamas tendría una pareja estable. Las fechas festivas como asi tambien alguna que o
mis piernas estaban entrelazadas en su cintura y en lo unico que podía pensar era en su cuerpo debajo de mi. Si, como tal adolescente que suspira al sentir rozarse con alguien que le gusta. Mis mejillas se tornaron rosadas y podía sentir la respiración agitada de Colton debajo de mi. Sus pasos fueron lentos, el agua estaba en una temperatura ideal y podría decir que con nosotros dos aqui dentro esta misma estaba en 30 grados. La espalda de Colton choco contra la pared de la piscina y este hizo que su cuerpo se aprete contra mi cuerpo lo que me hizo soltar un pequeño gemido de placer. -estas tan hermosa- mis mejillas tornaron un color azul al escuchar su cumplido y yo en respuesta, uni mis labios con los suyos. Fue un beso desesperado, un beso decidido. Sabía que quería hacerlo tanto como el lo quería. En el momento que su lengua respondio a la mia y gemido de excitación vibró de su garganta. Sus manos tomaron el control y fui suya. Todo mi cuerpo lo fue. Fueron
-señorita le aviso que en 20 minutos estara el amuerzo-La voz de la chica que trabajaba en la casa se escucho del otro lado de la puerta. No reconocía cual de las dos jovenes era, sin embargo la voz dulce me indicaba que eran una de ellas.-Gracias, enseguida bajo-mire mi aspecto en el espejo, mi cabello color manzana se encontraba completamente humedo. Lo había peinado para que pudiera secarse al aire. Luego del momento con Colton en la piscina, el se retiro hacía su oficina. Mi cuerpo quedo allí por unos 10 minutos mas intentando procesar lo que estaba sucediendo y luego corri hacía mi habitación. Me había vestido, en modo de suplencia de mi ropa mojada, me había colocado un vestido formal para estar en la casa.. Imaginaba que Colton estaría en el almuerzo y eso hacía que mis mejillas se tornaran de color rosado, algo común en mi al estar cerca
varios momentos nos quedamos observandonos, podrían haber pasado horas entre nuestros cuerpos entrelazados que ninguno de los dos se podrían haber siquiera quejado sobre algo. Su sinceridad transpasaba todos mis limites, la forma en la cual las palabras salian de su boca me ponía en una posición vulnerable. - El hecho de que digas esas palabras me hacen pensar en muchas cosas- quise ser sincera con el. Expresar mis pensamientos así como el se abría para conmigo. No podía evitar el momento que había pasado. Yo y todo el mundo podría haber notado que contar sus cosas mas intimas no eran una cuestion que le encantaba hacer. En este poco tiempo había aprendido a conocer a Colton y no sabía como reaccionar ante este hombre. - ¿qué es lo que quieres pensar ?- en su rostro podía ver preocupación. Estaba por expresar mis sentimientos confusos cuando mi telefono sono. Observe la pantalla y pude ver a Charly, podría imagin
estire mi mano derecha y la entrelace con la de el señor Maximo, al tener contacto con el hombre pude sentir lo calido que era. No era como si estuviera completamente pasmada por estar con un hombre que estaba culpado de haber asesinado a su esposa. - Un gusto verte Maximo, ella es Catie Denovan mi secretaría- Colton lo saludo y tomo asiento. Imitesu acción y me acomode a su lado. Las carpetas de Colton se abrieron y todo quedo expuesto en la mesa. Al parecer había imagenes por doquier de su esposa, me preguntaba lo doloroso que sería para esta hombre estar cursando esto. Para no perderme nada, tome mi tablet y la apoye en la mesa, allí podía anotar cada detalle importante que este hombre dijera. - ¿entonces que sucedio?. - las palabras de Colton fueron completamente duras. El debía saber cada detalle de lo que había pasado. Maximo se acomodo en la mesa, tomo un sorbo de agua y observandonos dio un suspiro. - mi esposa
al escuchar su tan poco directa pregunta gemí en respuesta. me encontraba excitada como el demonio ante este hombre. era increible como en dos segundos un plan de seducción había fallado por completo, era yo quien era la dominada. Al querer moverme y resistir su agarre, Colton poso su boca en mi oido lo que me hizo removerme contra su fornido cuerpo que ya comenzaba a resaltar una erección. - - Estas queriendo obtener de mi cosas que no ha obtenido nadie. ¿acaso tu mejor manera es ubicar mi polla en tu boca? la mención de la parte de su cuerpo que mas estaba deseando hizo que me removiera rendida sobre su cuerpo. Demonios Catie pense, el tenía su punto. Me dio la vuelta dejandome en frente de sus ojos azules y quise besarlo, algo que evito ya que su rostro se giro y mi lengua se deslizo por su mejilla. Colton me observo, como si no se hubiera esperando que hiciera eso. Al ver que mi acción no lo había disgustado busque su boca nuevamente, esta vez con exito nue
Al instante en que mis ojos pusieron su mirada en Catalina Garden, mi presion se bajo a -10. rapidamente mi mente engañadora y poco confiable, me llevo al momento en el cual Colton se encontraba teniendo una charla bastante intima con ella. Cuando su mirada se fijo en mi, sus ojos se oscurecieron mostrando desagrado y para mi gusto sorpresa. Era evidente que Catalina no esperaba encontrarme allí, lo mas probable era que su mente había creado una pequeña luna de miel de dos. ¿qué sucedio perra?. -no sabía que no venías solo. Al escuchar el comentario, una mueca de una pequeña sonrisa falsa se formo en mi boca. Colton me observo y luego la observo a ella, sin decir una palabra comenzo a caminar hacía adelante. Entendí por lo lejos que ibamos a su oficina. - necesitaba una secretaría que apoyara mis días y la señorita Denovan estaba disponible- Genial, era la señorita Denovan. hace aproximadamente 5 minutos era la que se follaba c
- me encuentro muy bien. Realmente estoy pensando en pegarme una ducha para poder comenzar a trabajar- las dos niñas corrian conmigo hacía arriba. No entendía porque debían seguirme por toda la casa. No era como si fuera algun tipo de invalida que no podía moverse por si misma. -¿por qué tienen que seguirme?- ingresamos a la habitación y esta ya estaba completamente pulcra. La ropa que había revoleado hacía horas atras, se encontraba doblada sobre la silla que se encontraba en la derecha de la habitación. - Son ordenes del señor Colton. debemos hacer caso en cada cosa que nos ordene. - ahora había entendido. Colton había dado ordenes de que no me dejaran hacer nada. ¿era idiota?. - realmente estoy agradecida por su invitacion, sin embargo me veo obligada a agradecerles. Debo ducharme y ponerme a trabajar- ambas se miraron entre si y asintieron. una vez sola, me tire sobre la cama, querí
si, yo era ángel, la mujer que se encontraba en frente de dos personas completamente desconocidas y quizas, tampoco conocía del todo a Colton. Ellos me observaron con una pequeña mueca de satisfacción en su rostro. -¿sabe que quiere ?- la pregunta salio de la boca de la mujer, su aspecto era realmente pulcro y podía ser cualquier ejectutiva que te cruzas en el centro de Londres caminando a hora pico. Colton se acerco a mi, fueron unos segundos cuando su boca estaba en mi oido. -¿quieres jugar?- mis sentidos se sintieron alerta al 100, en el aire se escucha una musica completamente cautivadora y todo alrededor se veía confuso. Colton me tendio una copa de chanpagne y la tome, la tome en mi mano y no podía no pensar a que se refiera con jugar. -¿jugar?- mi voz salio casi en un susurro, no quería quedar como una idiota delante de ellos. tampoco entendía porque Colton no me había dicho de que era este lugar. ¿