IGNACIO Llevo 4 días yendo de acá para allá, preguntando un clubes, bares, oficinas por este tipo.Me mandaron para lugares muy extraños, por suerte que mi papá hizo algo bien y me enseño portugués, ya no sé qué hacer, ver a este tipo es más difícil de lo que pensé. ¿Que voy a hacer si lo veo? ¿Primero tratar de hacer como que voy de parte de mi papá y que necesita algunas cosas? Mmm no sé, la verdad que para ser abogado se rodea de gente que no parece nada de ese mundo. Salgo del hotel y miro mi teléfono, que tarado me llego un mensaje de Susan y me olvide de responderlo, es que tengo la cabeza en cualquier lado, abro el mensaje.Susan: Hola ¿Todo bien? ¿Cómo vas? ¡Te extraño!Yo también la extraño tanto, ya quiero volver y.. ¡Auch! Intento abrir los ojos y siento que no puedo moverme, los brazos los muevo y noto que están atados en mi espalda, no veo nada creo que tengo los ojos vendados y los pies atados a algo, ¿Será una silla? ¡No me jodas! Esto
MARTÍN — Martín — Susan me ve y parece que vio un fantasma, me acerco.— Hola chicas, Susan ¿Podemos hablar?— veo que todas la miran sorprendidas, lo siento pero esto es urgente de verdad.— ¿Tiene que ser ahora? — pregunta incómoda.— ¡Si por favor es urgente! — Bufa pero me sigue igual.— Okey — nos alejamos un poco y todos nos están mirando, no puedo creer estar metido en medio de todo esto.— ¡Susan Ignacio está en la cárcel! — me mira en shock, no dice nada por un rato — ¡Susan! — pestañea como si saliera de trance.— Jajaja ¡Que gracioso! Jajajajaja muy gracioso Martín jajajaja — ¿De verdad piensa que es joda? me mira y cambia su cara — No es broma ¿no? — suspira — No Susan, es verdad, ¡Lo fui a ver! — abre los ojos.— ¿Desde cuándo? O sea ¿Desde cuándo sabes? — suspiro.— Desde ayer cuando me llamaron, hoy fui a confirmarlo y hay muchas cosas que tenes que saber — Me mira y niega riendo.— No quiero saber nada, ¡No quiero! —
SUSAN Caminamos por un pasillo poco iluminado, junto a Martín y un guardia, me revisaron completamente para entrar, esto fue horrible. — ¿Estás bien? — me pregunta Martín acercándose a mi.— Si estoy bien, estoy nerviosa — pone su mano en mi hombro.— Tranquila, estoy acá — suspiro y seguimos caminando un trecho más. — No se excedan con el tiempo — dice el guardia abriendo y dejándonos solos.Primero se acerca Martín y yo solo me asomo a escuchar.— Hola Ignacio vino Susan — dice Martín.— ¿QUÉ? Te dije que no le dijeras nada, ¿Cómo la vas a hacer venir a este lugar? — se lo escucha enojado — Ella quiso venir, tuve que contarle todo, pero algunas cosas seguro es mejor que las escuche de vos — dice Martín.— Sácala de acá, decile que que no quiero verla — dice Ignacio.— Está preocupada, estuvo llorando y los 2 sabemos que no querés que se vaya, tampoco querés que este llorando de nuevo — responde Martín.— Pero ella no sabe es
SUSAN — Por favor mantenete callado, porque si mi papá mal interpreta las cosas te puede dar una piña — digo preocupada.— Pero si no hice nada — Martín se encoje de hombros. — Soy el abogado de Ignacio. — Ellos te vieron en el bautismo de las gemelas — revolea los ojos.— ¿También llamaste a Mila y Valentín?— pregunta mirándome.— Si, necesito que todos nos apoyen en esto, ellos tienen contactos, al igual que Erik — suspiro nerviosa — Tranquila que cualquier cosa estoy para explicar, soy el abogado al fin y al cabo — me sonríe y me relajo un poco. — ¡Hola!— entro a mi casa y ya están todos sentados mirandonos. — No lo puedo creer Martín — dice Valentín negando. Nos vamos acercando y nos sentamos en la mesa y ya veo la cara de todos sacando cualquier conclusiónes. — Yo creo que hablo por todos cuando digo que necesitamos una explicación — dice Erik que está serio. — Yo no sé si hay demasiado que explicar es obvio lo que pasa,
MARTÍN — Tenemos que agarrarnos de eso, porque no tiene sentido que los contratos estén planteados como si Ignacio fuera el que los propuso, él no trabaja para la empresa y muchos fueron hechos cuando el aun ni siquiera estaba recibido, no tiene sentido, además de que su papá no sabe que tenemos los primeros 4 contratos, él era menor y ahí se especifica que él lo vendió, si bien Ignacio firmo, es ilegal, era menor de edad! — digo dejando unos papeles en la mesa.— ¿La audiencia cuándo es? — pregunta Fonseca. — Pasado mañana! tardaron en darnos la fecha, alguien está moviendo hilos hace 2 semanas que está encerrado, pero su papá no cuenta con que nosotros somos unos hijos de putas con los mejores contactos — me río y Fonseca igual.— Y el video que dijo Ignacio que tiene, lo tengo acá, el perdió el papel del locker y la llave así que recién anteayer lo pudimos recuperar, ¿Sabes todos los contactos que use? — suspiro agotado.— ¿Estás durmiendo vos? Te vez c
SUSAN El juicio fue programado para dentro de una semana. Una semana más de tortura, verlo así separados por las malditas rejas, es una tortura, es injusto, pero tengo que tener paciencia. Salimos de la audiencia y las chicas me esperaban afuera. — ¿Y? ¿Qué pasó? — preguntan.— ¡En una semana es el juicio! — responde Martín. — Bueno es solo una semana más — dice Nea.— Si una semana más — bufo. — Tranquila cuando pase esto, ya no hay de qué preocuparse — dice Mila agarrándome de los hombros para que caminemos juntas. — ¿Cómo lo viste? — Pregunta Nea caminando a mi lado izquierdo mientras Mila va abrazándome por los hombros de mi lado derecho — Bien esta pálido, con ojeras y delgado, pero mejor que cuando llegó, ya está recuperado de sus heridas — frunzo la nariz al percibir un olor raro, mientras pasamos por una panadería— ¡Wuagh! — hago arcadas y me dan nauseas. — ¿Estás bien? — Mila se preocupa y Martín que venía caminando detrá
— ¿Qué pasó? — pregunto, ¿Que puede ser tan grave? — ¡Que no sirven! Me dio positivo pero a Susan también así que esta re mal eso — pude sentir como se me hela el cuerpo, mis manos se adormecieron y no puedo reaccionar. — ¡Uhh la puta madre! ¿Susan estás bien?— Nea me sacude pero estoy estática. — No me jodas, ¡Está embarazada de Martín! — dice Mila y ahí reaccionó.—¡NO TARADA! De Ignacio — digo levantándome. del sillón, empiezo a caminar como perro enjaulado.— ¡Como puede ser! ¿Por qué ahora? ¿Qué voy a hacer? No es posible, ¿Qué voy a hacer sin él? Esto no debería ser así — me encuentro como loca diciendo mil cosas, pero entiéndanme necesito a Ignacio conmigo. Deberíamos estar juntos para que él también se enterara a la misma vez. ¿Y si no ganamos el juicio? ¿Que voy a hacer? — ¡Sus! Cálmate, sentate y respira— Nea me agarra y me sienta en el sillón.— O sea que ¿Yo también estoy embarazada? — dice Mila sin entender.— Si boluda, ahora feste
IGNACIO Los días son largos, es difícil estar acá, además de que me tienen en una celda solo, no puedo hablan con nadie, solo cuando dejan entrar visitas, pero no socializar, no ver la luz del sol, nunca pensé que fuera tan difícil, Susan me trajo libros y eso ayuda a pasar el tiempo, sus visitas son lo mejor de todo, hablamos reímos bromeamos, a pesar de toda esta mierda ella no se da por vencida, fui tan tonto al no confiar en ella, tan cobarde, porque ella me hace mejor, ella hace que todos a su al rededor seamos mejores, tiene ese don de sacar lo mejor de las personas.Cada día que la veo está más radiante, odio que tengamos que vernos así, que ella tenga que venir a un lugar de porquería así, por otro lado sé que ella está bien, la veo sonreír mucho y me gusta. Sé que igual está angustiada porque quiere que todo sea rápido y que salga de acá.Martín la cuida y me ayuda, es un gran abogado, es todo tan raro, él está enamorado de ella, pero igual hizo todo para