En ese momento, Gerald condujo su auto directamente a la villa de Barry.

Cuando llegó a ese lugar, descubrió que había muchos autos estacionados afuera de las puertas.

Barry tenía relaciones interpersonales muy complicadas. Había toneladas de personas que querían verlo. Sabiendo esto, Gerald no se sorprendió ni en lo más mínimo por el descubrimiento.

Solo significaba que tenía que estacionar el coche más lejos de la casa.

Al entrar al lugar, descubrió que Barry estaba realmente cargado de trabajos por hacer. Había una fila bastante larga que conducía a la puerta de su oficina.

Fue más o menos lo que experimentó Zack.

Había mucha gente parada fuera de la puerta. Parecía que Barry tenía que ver a todos y cada uno de ellos.

Gerald se rió entre dientes.

Después de eso, se acercó a la villa.

“Maia, ¿cuánto tiempo vamos a esperar? Hay toneladas de gente aquí. Mi papá aún no ha regresado a casa. ¡Estoy muy preocupada!".

De pie a un lado, Isabelle y los demás esperaban.

En ese