“… ¿Señorita Zorn? ¿Es usted?”, preguntó Gerald mientras miraba a los árboles.

“… ¿Gerald? ¡Así que, realmente eres tú!”, exclamó Juno emocionada mientras salía rápidamente de los árboles junto con sus sirvientes.

“¿Qué los trae por aquí, señorita Zorn?”, preguntó el sorprendido Gerald mientras la miraba.

“¿Qué quieres decir con lo que nos trae aquí? ¡Has estado desaparecido por dos días! ¡Aún así, yo sabía que aún estabas vivo! ¡Me alegro de que finalmente logré localizarte! De todas maneras, ¿qué estás haciendo aquí?”.

Al escuchar la pregunta de Juno, Gerald se volteó momentáneamente para mirar al Viejo Hughes antes de responder de manera incómoda: “… Sobre eso… Hablemos de eso cuando regresemos. Por cierto, ¿cómo están los demás?”.

“No te preocupes, todos están bien. ¡En este momento están descansando en la residencia de la familia Zorn!”, respondió Juno con una sonrisa mientras Gerald soltaba un suspiro de alivio.

“Ahora bien... ¿Quién es él...?”, preguntó Juno mientras