¡Gerald sabía lo que quería decir Elena sin siquiera pensarlo!

Definitivamente estaba tratando de hacer que él fingiera que era su novio para poder usarlo para lidiar con esa prima suya.

Sin embargo, Gerald ya estaba harto de estar fingiendo, y tampoco quería fingir ser su novio.

“Gerald, por favor, te lo ruego, finge que eres mi novio. Aiden y los demás se parecen demasiado a unos matones; no son tan tranquilos como tú. Eres el mejor candidato para mí. Si no me ayudas, mi prima definitivamente me comprometerá con ese tipo, ¡y realmente no quiero conocerlo!", suplicó Elena.

Aunque Gerald quería negarse, realmente no encontraba ninguna razón para hacerlo. Después de todo, Elena lo había ayudado algunas veces antes, y ahora solo le estaba pidiendo que le devolviera el favor. Era una simple solicitud y sería vergonzoso que se negara.

"¡Está bien!", Gerald asintió y estuvo de acuerdo.

Después de colgar el teléfono, Gerald no subió las escaleras con Aiden y los demás. En cambio,