En medio de todo ésto, Aurora y José fueron enviados a casa, Vladimir y Erick le pidieron irse para descansar al igual que a Gloria y a Antonio, ya son mayores y unos que otros ya tienen problemas de salud, así que en contra de su voluntad y controlado por estos dos, aceptaron a regañadientes irse a casa, teniendo más que seguro que Emily estaría más que bien cuidada con su esposo y su hermano.

Este fue el momento perfecto para que Gloria desapareciera de la vista de todos, después de llegar a casa, se encerró en su estudio, allí dio órdenes sobre qué hacer con las niñas robadas en el hospital.

Al sentarse en su escritorio, tomó el teléfono para realizar una llamada telefónica, después de sonar dos veces, la llamada entró en contacto, del otro lado se encontraba la enfermera que estuvo en la sala de operaciones de Emily, y que decidió trabajar para Gloria.

—Ya tengo el lugar perfecto para ellas, tú te quedarás con una de esas mocosas como tu hija, escoje la que quieras me da igual, ha