Narrador.
Salieron de casa todos en el mismo automóvil; James y Emma iban al frente Sofía, Cecilia y Julián iban atrás. El camino fue muy tranquilo, Emma y James compartieron unas miradas y Cecilia y Julián iban conversando entre ellos, Sofía por su lado pensaba en cuándo y cómo era la mejor forma de darle a su familia la noticia de su futura maternidad, pero igual no había encontrado las palabras.
Después de una hora de viaje habían llegado a un restaurante, tenía una fallada bastante campestre como todo en aquella área de la cuidad estaban en un pueblo completamente pequeño, aunque Emma dijese que estaba enamorada de la paz y tranquilidad del lugar no soportaría vivir en aquel lugar sin todas la comodidades que se presentaban en la ciudad, por ejemplo el lugar en el que se hacía el pelo, la carencia de centros de entretenimiento, tampoco podría vivir sin la locura de sus pacientes quienes, sin duda, alegraban sus días.
Emma Me desperté sintiéndome mucho mejor, el pie me había dejado de doler y ponerlo en el suelo ya no era tan doloroso. Vi a mi lado y encontré al hermoso de James, su piel trigueña, su rostro con una pequeña creciente barba, sus musculosos brazos y sus piernas estaban enrollados en una sábana, tenía una buena visión porque duerme en sus Calvin y sin camisa, así que todo queda al descubierto, bueno casi todo. James se veía tranquilo sus castaños colochos caían sobre su rostro, amo despertar y ver esto en las mañanas definitivamente deseo ver esto todas las mañanas. Me quedé mirando. —¿Te gusta la vista, nena?— preguntó en medio de un gruñido. — Amo esta vista, después de un día duro o de una noche tranquila.— dije en su oído. —Amaneciste de buen humor.— Me besó en la frente. —Voy al baño.—Antes de entrar
Emma — Emma, eres lo mejor que le ha pasado a James en mucho tiempo. Bienvenida a mi familia y GRACIAS. Si llorar fuera uno de mis hobbies, lo hubiera hecho, pero simplemente no me gusta, y la verdad me parece estúpido y tengo convicciones al respecto, las suegras te suben a un pedestal y en cuanto tu relación escala ellas te bajan, tenerle ahora de aleada, no me emociona, simplemente me recuerda que las competencias que tendré que ganar con James, empiezan en su casa. — Gracias. Siento haber arruinado su desayuno. —Te juro que es el mejor que he tenido en años. —Sí, el mío también. —Marry, lárgate de mi casa. Tienes cincominutos para sacar tu trasero de aquí. Marry no dijo nada, subió y en tres minutos había sacado todas sus cosas. El día fue un poco extraño pues había dejado muy en claro cómo me comporto 
EmmaJames detuvo el auto y me dijo que me iba a vendar los ojos. Digamos que el amor no solo es ciego sino que estupidiza y le dejé hacer lo que quería. Abrió la puerta para mí y caminé algunos pasos a su lado, tomada de su mano con fuerza, temía caer o simplemente despegarme y perderme, mientras divagaba en mi mente con respecto a sus intenciones con este paseo —Las cuales espero no terminen en ruptura, boda o propuesta matrimonial— sentí mis pies lejos del suelo, no veía y ya no caminaba por mi cuenta.El amor tiene una cuota de confianza, totalmente confío en James, pero detesto la ceguera y los finales que provoca, en realidad, le temo a la cegura. Después de un rato sentí mis pies de nuevo en el suelo, James me posicionó en lo que parecía una baranda. Hizo un breve conteo y soltó la venda, me permitió ver el hermoso y claro a
EmmaHabíamos regresado a casa después de compartir con su familia, que mi novio pensase que estaba embarazada, conocer a su ex loca y la mejor parte de todas pasar un tiempo a solas lo cual parecía demasiado reconfortante. James y yo necesitábamos un poco de conexión y ser más sinceros.Volver a la rutina no parecía tan agotador, simplemente normal, en nuestros trabajos, en mi oficina todo estaba bien y al parecer en la de James todo estaba igual, en la tarde sacaría una hora después del almuerzo con James para visitar a Zack y que revisara mi tobillo. James había insistido con locura en ir a comer y no quería reventar esas sensación de estar en un buen lugar como pareja, así que acepté a dejar mis trabajo para ira comer con él por ir a comer así que acepté para darle el gusto.El cumplea&nti
EmmaMi nuevo hogar está amoblado y decorado, así que lo único que hicimos fue llevar nuestras cosas a ella James y yo tuvimos una fin semana divertido navegamos sobre el lago, leímos, comimos, jugamos, nos amamos, miramos televisión y finalmente nos tocó salir de nuestra burbuja e ir a trabajar. Mi pie finalmente se desinflamó y la terapia le hizo bien así que comencé a usar tacones de nuevo, eso hacía mi día mejor.En la consulta intento mantenerme activa viendo todos los grupos de pacientes y sus diferentes padecimientos por edad, así que hoy tenía consulta con una de mis pacientes más divertidas, Eleonor es una niña con mucha imaginación y sus padres tienen trabajos nocturnos, su papá es jefe de la policía y su mamá es enfermera, así que justo cuando ella y su hermano se quedan a cargo d
JamesEl tránsito estaba muy pesado, del hospital a mi oficina duran 15 minutos hoy que tengo prisa duré 15 minutos más. Lo único que me importaba era llegar y saber que no era nada grave, que no moriría, un accidente sin importancia, sin embargo, la llamada del hospital decía todo lo contrario: ¨No podemos informarle por teléfono, usted es el contacto de emergencia tiene que venir para saber más información.Emma me lo había dicho cuando nos mudamos juntos, que si íbamos en serio lo mejor es tenernos el uno al otro de contacto de emergencia, no nos costaba nada y la verdad mandamos los papeles por el correo ni siquiera tuvo que ir al hospital ni yo, Verónica no estaba en la cuidad Emma me había comentado que estaba siendo capacitada en Inglaterra y que le tomaría un par de meses o más, así que no hab&i
JamesEl estado de salud de Emma es pobre, estaba enferma sin saberlo y eso complicó las cosas, le realizaron la cirugía y lograron estabilizarla sin embargo no lograron hacer que despertara, todos estaban preocupados, los Pieth se veían desgastados, yo no recordaba haber sido de la sala de espera desde entonces. Y no quería hacerlo, algo tan simple como ir caminando por la cuidad y ser atropellado para descubrir que no está tan sana como pensábamos.Emma está en cuidados intensivos de nuevo y todos estamos esperando que la cirugía del corazón sea un éxito, que la inflamación en su cerebro no haya generado daños y que salga del efecto de los anestésicos que le dieron.—James… ¿Cómo te sientes? —preguntó mi hermana en un tono calmado de voz. —Todos creemos que deberías descansar ir a casa y&he
JamesEl jueves me quedé en el hospital y dejé que el resto creyeran que fui a casa, pero volví a la 1:30 pm, ya es viernes, acerqué mi silla a la cama y besé su mano, la cuál debería de tener un anillo o dos que demostrará que yo era el amor de su vida. Sé que algún día ella aceptará ser mi esposa.Lo que Emma y yo tenemos es para largo.Alejandro entró a la habitación, la revisó y me dijo lo testarudo que era, me invitó a un café y me enseñó dónde estaban los cuartos de descanso por si sentía necesario dormir un poco sin ir tan lejos, cuando ya estuvimos en la recámara de Emma comenzó a hablarme de él y mi hermana, llevaba rato diciendo cosas a las cuales no le ponía atención pero al verle evaluar a Emma nuevamente tuve que intervenir.—S&e