Capítulo 31

Cecilia recibe aquella noticia con una sonrisa, la careta de Zaira ha caído, ahora puede acabar con el obstáculo que siempre estuvo deteniendo sus planes.

—¡¿Dónde está mi esposa?! —Arthur toma del brazo a Cecilia, la amenaza con una voz fuerte e imponente.

—No te lo diré.

Arthur la empuja, chasquea los dedos y ordenan que traigan a su esclava, una loba sucia, con el cabello enmarañado y con golpes en su cuerpo llega y se arrodilla en el suelo

—Esta es la madre de Zaira, desde que mi querida esposa escapó, la atrapé y la he convertido en mi esclava, si te callas te juro que te haré algo peor —Arthur amenaza con severidad a Cecilia.

—¡¿Sabes dónde está mi hija?! —Aquella loba en el suelo levanta la cabeza, sus ojos se llena de lágrimas, llegó a creer que Zaira había muerto.

—Que no te diga dónde está, no significa que no la devuelva aquí, creeme esa lobita me estorba y ha dañado mis planes.

Cecilia deja ver en su mirada la rabia y el enojo que siente por Zaira, Arthur lo no