Stanley Bell fue detenido por Jack en el momento en que llegó a las puertas.

“Stanley”.

Stanley sonrió. “Ah, es Jack. Escuché que tu espíritu ha sido invencible últimamente”.

Jack sonrió y dijo: “Y escuché que tu puesto en Empresas Bell está en peligro”.

Stanley frunció el ceño. “Hmmph, y eso es todo gracias a tu hijo. Mi título de director ahora no es más que un título”.

Jack se inclinó hacia Stanley con una sonrisa astuta en su rostro. “Stanley, ¿cómo te gustaría vengarte?”.

Stanley había escuchado rumores de que Jack y Jay habían cortado sus lazos. En ese momento, él supuso que era cierto.

“Jack, ¿estás aquí para ayudarme?”.

Jack respondió: “¿Por qué no hablamos en otro lugar?”.

Los dos hombres llegaron a la oficina de Stanley. Jack dijo: “Stanley, siempre que estés dispuesto a apoyarme en una cosa, te juro que puedo ayudarte a recuperar el control de todo Empresas Bell”.

“¿Qué quieres?”.

“Para que Empresas Ares y Gran Asia se separen, Empresas Ares ha dejado de fabricar