Angeline salió apresuradamente para detener la discusión cuando ella escuchó la discusión fuera de la puerta.

“Es normal que los niños se peleen, pero son ustedes dos los que están peleando. ¿No creen que es infantil? Entren y hagan los preparativos para su viaje a la Tierra Sagrada”.

La expresión de Jay se volvió naturalmente sombría después de ser regañado por su esposa. Él miró con resentimiento a Cole y dijo: “Entra”.

Después de entrar, Angeline preparó una tetera de té de crisantemo y les sirvió un vaso a Jay y a Cole.

Cuando los dos hombres vieron el calmante té, comprendieron que Angeline pretendía deshacerse de sus aires hostiles para que ellos pudieran charlar pacíficamente.

“Primo Cole, tú y Jaybie se irán pronto de la Capital Imperial, así que ¿por qué has traído a Dawn al Chalet de Turmalina?”, preguntó Angeline con sospecha.

Un rastro de dolor cruzó por los ojos de Cole. Le tomó bastante tiempo antes de poder decir: “Tu hermana mayor se va a casar y no quiero que Daw