Finn estaba avergonzado.

‘’No… Has entendido mal’’, refutó Finn.

Sin embargo, su negación esta vez ya no era tan poderosa y resonante como antes.

Finn sintió como si actualmente hubiera dos almas dentro de su cuerpo. Un alma quería desesperadamente liberarse de los grilletes y correr hacia Bebé Zetty, pero la otra tiraba de la otra con todas sus fuerzas.

Finn sintió que sus pensamientos se estaban volviendo difíciles de soportar.

Al ver que él no estaba haciendo esfuerzos adicionales para pedirle que se quedara, Tammy se fue mientras sollozaba.

De repente, Finn sintió que había arruinado su vida al no pedirle que se quedara. Él necesitaba meditar bien las cosas y reconocer sus verdaderos sentimientos para tomar la decisión correcta. De esta manera, él no terminaría lastimando a las personas más cercanas a él.

Desde un tiempo, Finn trató de levantarse el ánimo. Él actualmente era la mano derecha y asistente de Jenson. Cuando Jenson estaba enfrentando una situación de riesgo, él