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Se acerca a ella — Porque te deseo como mujer y te quiero, Melo — sostiene .
Lo aleja cuando escucha voces proveniente de otro pasillo que justo daba con el suyo, limpia su boca y acomoda su ropa . Mientras que Samuel la observa de costado y niega con su cabeza, Melo no aguanta las ganas de decirle lo que en su cabeza pasaba — Está noche tengo que trabajar — le asegura .
Cuando quiere responder ve que ella comienza a caminar alejándose , esa mujer lo descontrolaba completamente pero también hacía que él se interese en esa indiferencia que sentían y no podía creerlo . Samuel no estaba dispuesto a caer a los pies de ninguna mujer, solo quería jugar como siempre pero Melo no era igual a todas . Melo no se entregaba fácil a sus poderes de seducción y de estabilidad económica, notaba lo enfocada que estaba en su carrera universitaria y quería conocerla más pero tampoco podía dejarse conocerse ante los ojos de ella . Sacude
11.Era su hora de comenzar — Caerás en mis pies, Melo. Ya lo verás — susurra .Ese día Melo quedó todo el día con un malestar sin poder disimular, por dentro se moría por decirle lo que le pasaba pero ahí estaba Ana sonriendo con las demás mientras le contaba los planes. Lo escucha porque gritaba todo y las demás repetían aplaudiendo, se sentía una reina dentro de tantas mujeres . Antes de empezar la nueva clase, la señala — ¿ Qué te pasa? — pregunta mirándola .Mira a su alrededor y se ve que le decía a ella — Nada — responde cortante .Otra de sus compañeras le comenta algo en su oído, asiste y sonríe — ¿ Y qué hacías con Samuel en los pasillos? — pregunta .Todos sus nervios volvieron a renacer en su cuerpo y no sabía que más decir, respiro hondo y otra se le acercó — Es su becada — se burla .Ana no soporta escuchar eso y se ríe — Es verdad había olvidado que eras la
12.Le toma su rostro entre sus manos haciendo que se miren — Tu eres la indicada, quiéreme como yo lo hago — le pide antes de besarla .Melo no era de esas personas que tiraban todo por la borda cuando un hombre la enloquecía demasiado . Respiro hondo — No digas tonterías — lo apartaSamuel creyó que nunca en su vida iba aparecer una mujer que logrará sacarlo de su propio eje, no creía en el amor a primera vista y menos en sentirse tan atraído con ella. Cada día que la tenía en frente quería abrazarla, ayudarla con lo que sea pero lo alejaba . A veces quería desaparecer o simplemente no ser la persona conocida que todos buscaban algo de él y se aprovechaban . Él necesitaba que ella lo quería y después no importaba nada más .Niega con su cabeza, intenta estirar sus manos para atraerla a él pero se resistía — Vámonos — le pide .Frunce su ceño — ¿ Estás lo
13.Se pone firme, niega con su cabeza — No es mi novia, no es nadie para mi. ¿ Estás celosa? — pregunta sonriendo .No era tiempo para perder la cabeza en el trabajo por alguien que apenas conocía, lo empuja — Ya Suéltame porque no estoy celosa, estoy trabajando y tú eres un cliente. Mantén la distancia — dice molesta .Abre sus brazos soltándola — Será como tú quieras — sostiene .Por dentro no quería que se alejara de esa forma pero debía mantenerse al margen porque si alguien se enteraba que se conocían todo se iba a complicar — Vete — ordena .La esquiva y se voltea — Ya no te buscaré, si quieres estar conmigo vendrás y sino fue un placer — sostiene moviendo su cabeza .Observa como se va a su mesa, habla con Ana y no le gustaba para nada que sea así. Apoya su brazo en la mesa de madera donde era su lugar de descanso para recuperar el aire, se mira por abajo y se ve
14.Melo parecía no estar pendiente de la clase, en su cabeza lo único que podía pensar era en la idea de que Samuel debía estar con Ana porque era lo correcto . Ella solamente fue alguien que soñó demasiado en que un hombre podría darle amor sin preguntarle que hacía de su vida y como luchaba en su día a día para sobrevivir en esa ciudad enorme .Cuando quiso que alguien la vea, ya era demasiado tarde y comprobó que Samuel era un millonario que no estaba a su alcance . En su cuaderno de apuntes comenzó a escribir « no eres la indicada para ser amada » y cosas así que no tenían nada que ver con la clase de economía que estaba presenciando . Por culpa de todo lo que le tocó vivir hacen que su personalidad, autoestima más que nada se fuera por el suelo y en la mínima inseguridad era como si su mundo se derrumbara sin que nadie la salve de los golpes . Melo siempre se vio sola hasta en los pasos más importante de sus decisiones .Le to
15.Intenta llevarla hasta la entrada pero se resiste mientras él abre la puerta — Ven — le pide .Hace unos pasos llena de timidez, nunca nadie había tenido semejante grado de pasión con ella y afecto como para regalarle una casa, algo tan importante como delicado . No podía dejar de reírse, tapaba su boca y buscaba que todo sea un chiste — Esto tiene que ser una broma de mal gusto y no debiste hacerlo — le dice mirándolo .Samuel se estaba volviendo completamente loco por ella, sin mediar sus consecuencias y menos si parecía un maniático frente a los demás pero necesitaba tenerla cerca cuánto más tiempo mejor para él . Se ríe — Te quiero a mí lado para que entiendas que Ana no me interesa — sostiene .No podía seguir manteniendo esa locura y necesitaba diferenciar entre lo que quería de él y lo que sentía . Respira hondo y levanta su mano — Ya basta — ordena .Retrocede por el grito que dio — ¿ Y
Entrecierra sus ojos — ¿ Y qué me vas a pedir a cambio?, sé que las cosas no son gratis en este mundo y menos contigo — asegura .Sonríe y toma su rostro — Te quiero a ti, nada más — susurra sobre sus labios.Dejando atrás todo su orgulloso, prepara las maletas con su amigo y se miran — ¿ Estás segura que harás esto ? — pregunta mirándola .Respira hondo — No quiero separarme de ti , debemos empezar y terminar juntos, ¿ no lo crees ? — pregunta sonriendo .La abraza y no la suelta — Gracias , juro que este año será diferente a todos pero no lo puedo creer — la suelta saltando — Iremos a vivir con el hombres más rico del país — dice con mucha felicidad .Ver la felicidad de su amigo en su rostro no tenía precio, era la única oportunidad de poder luchar por lo que importaba y Melo lo entendía de esa forma . Si no estaban juntos nada valía la pena — ¿ Y cómo haré para no tener que entregarme a lo que ya sabes ? — pregunta señalando la sali
Larga una carcajada y mueve el brazo para que lo suelte — ¿ Estás diciendo que estoy enamorada de ti ? — pregunta irónicamente .Ahora le toma la cintura — ¿ Y no es así, princesa ? — pregunta acercándose a ella .Niega con su cabeza — Hace tiempo que prefiero empezar de cero pero de otra forma Samuel y tu solamente eres la persona que paga mí beca — le aclara .Para Melo lo más importante era poder hacer realidad los sueños que algunas vez tuvo con sus padres, no podía dejar que una simple pérdida de visión por un hombre sea la consecuencia de terminar con todo lo que había creado por años . Ya de tener que vivir en la casa de Samuel era lo más complicado que podía hacer y su amigo la entendía .Retrocede hasta chocar con una pared — Sabes que pensaba que podríamos querernos y no tener que insistir tanto Melo — le dice rozando sus dedos por toda su cara .— Nos van a ver — susurra mientras siente las manos de él por debajo de la
Frunce su ceño — ¿ Y tú quien te crees que eres para andar vigilandome ? — pregunta molesta .Aprieta sus puños para no cometer ninguna locura — Soy como tu novio , la persona con la que te acuestas y ahora convives — le remarca ..Larga una carcajada — ¿ Y quién dijo que eras mí novio ? , estás confundido Samuel porque yo no le pertenezco a ningún hombre — dice mirándolo .Melo necesitaba marcar un limite en ese hombre que lo único que hacia era intervenir en su vida , desde que las cosas se volvieron mas serias de lo que creía . Recordó que ese hombre solamente era un empresario que le pagaba parte de su beca, ella sola debía poderse pagar la otra mitad y seguir manteniendo sus estudios .Ya no sabia de que forma mantenerse en lineal para que no se genere ningún tipo de conflicto con él pero cada día era peor, ya no podían seguir siendo las mismas personas y así empezó a verse lo mal que se llevaban . La atracción que se sentía entre ellos se tr