Leo no decía nada, aunque sabía que Ana no tenía nada que ver, ella solamente estaba cumpliendo con una promesa que le había hecho a su novia. Por lo que Miranda se había ido caminando hacia el departamento, ya que Leo le quito el auto desde que la sustituyeron como manager esperaba que se parara un taxi, pero no tenía éxito cuando de pronto Marcos toca el claxon del carro a lo que ella se sube furiosa. ― ¿Sabes Marcos? Eres un imbécil ¿Por qué rayos me dejaste sola? Leonardo me descubrió y por si fuera poco me pondrá una demanda ― decía Miranda furiosa. ― Contratamos un buen abogado, no te preocupes ― dijo Marcos manejando. ― Por supuesto un abogado, pero por si no lo sabes a ti también que tienen en la mira ― dijo Miranda cruzándose de brazos. ― A mí no me metas en tus estupideces, no es mi culpa que a ti que descubran en este plan ― hablo Marcos volteando a ver a Miranda. ― Los dos estamos metidos en esto si yo me hundo tú que hundes conmigo ― hablo Miranda amenazando a Marco
― Estarás bien, mi amor lo estarás ― decía Eloísa llorando, mientras que Leo quería cerrar los ojos. ― No, mi amor no cierres los ojos, quédate conmigo ― decía Eloísa tratando de que él mantuviera los ojos abiertos, no hablaba, pero la miraba que estaba desesperada, por lo que apretó su mano. ― La ambulancia llegará hermano tranquilo ― decía Enrique acariciando el cabello de Leonardo quien estaba luchando con su vida para no morir. Rápidamente, se hizo una rueda de personas para mirar que el cantante más famoso fue disparado, Alberto quiso correr aquella gente una vez que los paramédicos habían llegado para darle atención médica llevándolo a la ambulancia tratando de mantenerlo con vida. Eloísa miraba que la vida se le iba de las manos, mirando a Leo entre la vida y la muerte, lloraba por su amado, rogaba a Dios por un milagro, uno que le salvara la vida a su esposo acompañándolo hasta el área de urgencias donde sería atendido, pues fue llevado al quirófano Enrique abrazo a su cuña
― Bien me pondré en contacto con usted y con Enrique Rosas Guzmán para la declaración de los hechos ― hablo Víctor haciendo que ella asintiera, pues quería que se hiciera justicia, sin embargo, ella tenía la esperanza que él sobreviviera de aquellos disparos que le habían dado a su esposo.El agente salió del cuarto, Víctor veía con pena a Eloísa que estaba al lado de su esposo esperando, aunque sea un milagro que tal vez aquello era imposible, sin embargo, se encuentra con Enrique Rosas Guzmán, por lo que de inmediato se acerca a él.― ¿Usted es Enrique Rosas Guzmán? ― preguntaba el oficial Víctor Mendoza.― El mismo ― dijo Enrique cruzándose de brazos.― Mucho gusto soy el agente oficial Víctor Mendoza, vengo del ministerio público, estamos llevando el caso de su hermano ― dijo el oficial haciendo que Enrique pusiera un poco más de atención, ya que le interesaba saber qué había pasado con su hermano.― ¿Ha investigado algo? ― preguntaba Enrique un tanto ansioso, quería saber quién h
Mientras que Enrique su vida fue muy injusta con el primero, Moria Selena segundo está pasando el dolor de perder a su hermano al único que tenía en vida ahora entendía el dolor que sentía cuando falleció Selena es un dolor que no se puede describir un dolor que sientes que en algún momento que va a matar más cuando él no tuvo tiempo de despedirse de nadie solo apretó mi mano para después irse y no volver Enrique me abrazaba tratando de darme fortaleza aquella que ya no existía y parecía que en cualquier momento yo me volvería loca ojalá esto fuese un hechizo que alguien me despertara y me dijera esto no es realidad esto es un mal sueño ojalá que Leonardo me dijera que esto no es real o mejor dicho desearía que él viniera por mí y me llevará de esta cruel realidad en la que ahora estoy sumergida. Todos los medios de comunicación sabían del deceso de Leonardo querían entrar al velorio, pero no lo permitimos, queríamos que esto fuese lo más privado posible, queríamos vivir ese duelo en
Al llegar espero en la sala hasta que llegara el oficial Víctor Mendoza para que llegaran los responsables del homicidio de Leonardo. Por lo que después de unos minutos los hacen pasar mirando a Miranda y a Marcos esposados, Eloísa se quedó quieta, tenía coraje por dentro, pues al fin había descubierto quién había matado a Leonardo, puesto que Enrique quiso golpear a Marcos, pero se contiene, pero ella no de alguna manera tenía que sacar su rabia. ― Ustedes ― hablo Eloísa mientras trataba de mantener su cordura, aquella que ya no existía. ― Hasta que nos vemos las caras malditas amnésica ― decía Miranda sonriendo con malicia, por lo que Eloísa no puede más y se abalanza sobre ella abofeteándola. ― ¡Por tu maldita culpa, Leo está muerto porque no nos dejaste en paz! ¡Por qué diablos sienten tanto odio! ¡Por su maldita culpa, Leonardo está 3 metros bajo tierra! ― decía Eloísa dándole de cachetadas a Miranda, pero Enrique la sostiene. ― Eloísa le hará daño al bebe, no es bueno para t
Eloísa se tapa la cara llorando como si le hubiesen quitado un pedazo de su alma, era un dolor que le estaba carcomiendo el alma, pues ella estaba tratando de vivir por su hijo que venía en camino, pero la realidad era que no tenía fuerzas para volver a vivir llevándose esa foto de Leonardo Rosas sobre su pecho y durmiendo con ella, pues eso le permitía estar cerca de él. Han pasado 3 años el hijo de Leonardo y Eloísa tenía dos años y medio su mamá le había puesto Eduardo ella se desvivía por su hijo al igual que Logan quien se la pasaba consintiendo a su sobrino sobre todo Enrique quien había comenzado una relación con la hermana de Cesar Costa, pues ambos se habían enamorado sorpresivamente comenzando una relación muy bonita después de tanto dolor que había pasado hace más de 3 años atrás, sin embargo, Miranda había muerto en la cárcel, pues ella tenía una extraña enfermedad que termino por volverla loca, pues ella se imaginaba que se casaba con Leonardo incluso que bailaban un val
Leo recordaba la noche en que perdieron el control cuando él estaba al volante, habían discutido fuertemente con su esposa que fue por un simple contrato, pensaba que no la soportaba ni tantico, pero fue todo lo contrario, él estaba enamorado tan profundamente de ella que no se había dado cuenta ahora ella había perdido la memoria él quería luchar por su amor, pero su hermano Logan no dejaba que se acercara más aún después del altercado que tuvieron en el hospital.― Por favor Eloísa despierta, aún tengo fe de que nuestro matrimonio funcione, perdóname por haber sido el peor ser humano que existe ― decía Leo mientras se estaba quitando las lágrimas cuando Logan había entrado.― ¿Qué haces aquí? Creo que fui claro contigo, no quiero que te acerques a mi hermana ― le dijo Logan molesto.― Es mi esposa, tengo todo el derecho de estar con ella ― refuto Leo enojado.― Eloísa no es tu esposa, no es nada tuyo, entiende ― le respondió Logan de vuelta.― Si lo es ― defendió Leo a capa y espada
― Haber venido fue un error ― contestaba Eloísa mientras se cruzaba de brazos.―Ya lo sabes y acatarás todas mis órdenes cuando estés a mi lado, cada evento cada entrevista estarás junto a mí mostrándome que me amas ― le dijo Leo de vuelta.― Eres un miserable Leonardo y un tirano ― le contesta Eloísa cruzándose de brazos mientras se sentaba en la silla esperando a que él saliera del estudio de grabación. Pasaron las horas mientras que a Eloísa se le hacían eternas, ya quería que acabara todo esto, sin embargo, Leo al terminar de grabar la levanta de un jalón del asiento haciendo que ella se soltara al instante. ― Se ve que no te enseñaron modales, ¿Verdad? ― dijo Eloísa de vuelta. ― No tenías por qué levantarme de un jalón ― le recrimino Eloísa de vuelta.― Te dejaré las cosas claras, yo no seré ni tu amigo ni tendrás un matrimonio de princesas, quítate esa idea de la cabeza ― le dijo Leo de vuelta dedicándole la mirada más fría del mundo. ― Así que deja la estupidez de querer enamor