― Eso espero por qué de mi cuenta corre Marcos no se saldrá con la suya ― Decía agarrando las manos a Ana tratando de contener su coraje, por lo que Marcos había hecho meterlo a la cárcel.
Por lo que Eloísa fue de nueva cuenta corriendo a su casa, él había guardado el collar que su madre le había dado de pequeña era de oro, por lo que alcanzaría para sacar a su hermano de la cárcel...
Puesto que sale de la casa de nueva cuenta yendo a la casa de empeño más cerca, trataba de empeñarlo y que le dieran una buena cantidad de dinero, pero lamentablemente no era así; por el contrario, la cantidad de dinero era por debajo de la fianza que tenía que pagar.
Sin embargo, Miranda estaba preparando las maletas para irse a Brasil cuando de pronto Alberto le llama.
― ¿Bueno? ― preguntaba Miranda al otro lado de la línea.
― Hola, hermosa, soy yo ― respondía Alberto sonriendo haciendo que ella solamente rodara los ojos.
― Ah, hola ― respondía Miranda bufando un poco fastidiada.
― ¿Estás bien? ― pregu