Capítulo 28
Él deja el paquete de donuts y las bebidas en la encimera junto a la cama antes de subir a Leila a su regazo, con su suave trasero apretándose contra él, y sonríe ante la ligera sacudida de placer que lo recorre.

Leila lucha por liberarse; no quiere intimar ni ser cariñosa con él. Solo empeorará la herida que ha dejado en su corazón cuando la deje por su elegida.

Es mejor que la traten como si no existiera.

¿Por qué tratarla tan fríamente en público para después mostrarle su cariño cada vez? ¿Acaso no sabe que lo que más atormenta es la leve esperanza?

Tatum la abraza con fuerza mientras ella se retuerce y le besa suavemente el cuello; cada roce de sus labios calma el efecto de la furia en el corazón de Leila.

"Sé que estás enfadada conmigo, y me lo merezco. Perdón por la reciente agitación, son... tiempos difíciles", le susurra Tatum al oído, con voz suave y tranquilizadora, y cuando Leila le mira a los ojos, no contienen más que remordimientos.

A Leila se le llenan
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP