El olor a lluvia crece en el aire, así que me rodeo con los brazos. Llevo una cazadora de cuero color canela, unos pantalones pitillo, una camiseta blanca ajustada y unos tacones color canela.

"Luna. Por fin has venido".

El corazón me da un vuelco cuando la voz de Jai me saca de mis recuerdos.

Hace años que no me llamaban así…

Me giro y, aunque llevo una peluca negra y llevo gorra y gafas de sol, me ha reconocido, probablemente por mi olor.

Tiene el mismo aspecto, quizá un poco más rudo, pero también hay cansancio en sus ojos.

Ha estado aquí con Valerie todos estos años. Debe haber sido muy duro.

"Jai... siento mucho no haber estado aquí", susurro, sabiendo que mi ausencia también le dolió a él.

Lo había llamado anoche, y me había contestado una hora después preguntándome cuándo quería venir, pero esto es respecto a Valerie, y le pregunté si podía venir hoy. Aceptó, lo cual le agradezco.

"Desearía que estuvieras aquí por ella", responde en voz baja, haciendo que se me apriete