"¿Cuántos años tienes? ¿Piensas buscar un colegio o universidad para seguir estudiando?". Mandy se alegró de ver que Harvey estaba motivado.

Si su esposo tenía realmente la intención de estudiar, ella estaría dispuesta a pagarle los estudios en el extranjero.

Pero Harvey negó solemnemente con la cabeza y dijo: "No es para mí, sino para Xynthia".

"¿No está ella en su tercer año de instituto? Pronto irá a la universidad".

"He descubierto que las universidades de Buckwood no son tan buenas. Me temo que Xynthia tendrá que ir a Wolsing, Mordu, o tal vez a San Francisco para ir a la universidad".

Mandy se rio y dijo: "Harvey, puedes dejar que papá y mamá se encarguen. Solo eres su cuñado. No tienes por qué preocuparte tanto".

Harvey se frotó las sienes. No podía decirle a Mandy que había visto a través de los verdaderos colores de los de la comunidad educativa de Buckwood en la reunión académica de esa noche.

"Parece que tengo que adelantar el viaje a San Francisco. Ayudaré a Xynthia