Después de esperar a que Harvey York se marchara de la sala de reuniones, Ray fijó sus ojos afilados en Roxanne Barr y el resto.

Roxanne, Felix Howard, Brody Jenner y el resto bajaron la cabeza, sin atreverse a hablar. Ya no podían respirar bien.

Ray miró directamente a Roxanne y preguntó despreocupadamente: "¿Qué mano fue?".

Aunque Ray no explicó nada más, Roxanne supo al instante de qué estaba hablando. En ese momento, solo pudo extender su temblorosa mano derecha y dijo con voz temblorosa: "Esta mano".

"Viendo que eres una mujer, diez bofetadas serán suficientes", anunció Ray.

"¡Paf!".

Roxanne no se atrevió a defenderse en absoluto ni a soltar más tonterías y se dio una gran bofetada.

La bofetada fue tan fuerte que su mejilla se hinchó al instante y se tornó de un intenso color rojo.

Porque Roxanne sabía muy bien que, si no seguía las órdenes de Ray al pie de la letra, su final sería aún peor del que ella podía imaginar.

Ray no se molestó en mirar de nuevo a Roxanne mientra