Ignorando su pregunta, Harvey York frunció las cejas y levantó la voz. "¡Dímelo! ¿Qué es lo que pasa con este cheque?".

"Es…".

Simón Zimmer vaciló.

"¡¡¡Dime!!!".

Harvey rugió de repente.

En ese momento, Harvey emitió una vibra tan violenta y tiránica que era difícil describir en palabras. Era tan intenso que Simón Zimmer y el Amo Zimmer casi dejan de respirar.

Los dos sintieron como si algo grande e invisible estaba apretando sus cuellos.

Nada era más aterrador que la mirada de Harvey.

Simón estaba tan sorprendido, tan asombrado, que terminó confesando todo.

"¡Gran Hotel W de Buckwood!".

"¿Cuánto tiempo tiene de haberse ido?", Harvey gruñó.

"Casi media hora", pronunció Simón. "Pero es probable que sea demasiado tarde ahora…".

El Amo Zimmer asintió, estando de acuerdo. "Sí. Incluso si conduces un coche deportivo, no podrás detenerlos".

Harvey lanzó todos los documentos al piso y corrió tan rápido como pudo mientras llamaba a Ethan Hunt.

"¡Ethan, necesito un helicóptero! Es