Harvey sacudió la cabeza con impotencia después de ver a Larisa alejarse.

Xynthia se enfureció.

“¡Sinceramente! ¡¿Acaso ella no sabe el talento que tienes?!”.

“¡Ella simplemente no te cree!”.

Xynthia dudó por un momento cuando terminó de quejarse.

“Cuñado, ¿es verdad todo lo que dijiste?”, preguntó ella mientras miraba a Harvey.

“¿Larisa va a tener problemas?”.

Harvey asintió.

“Por supuesto. Pronto estará en una situación que pondrá en peligro su vida”.

“Cierto. También te afectará su energía maligna. Es mejor que tomes precauciones”.

Harvey puso unas cuantas gotas de sangre en un nuevo trozo de pañuelo antes de dárselo a Xynthia.

“Lleva esto contigo”.

“De acuerdo”.

Xynthia asintió inteligentemente con la cabeza antes de guardarse alegremente el pañuelo en el bolsillo.

“¡Cierto!”.

Después de guardar el pañuelo, Xynthia se dio una palmada en la cabeza y dijo: “Acabo de decirle a Larisa que jugaríamos al Asesinato de Guiones con algunos de mis otros amigos de la universida