Ryuichi ya había usado todos sus trucos, pero ninguno fue útil.

La espuma blanca había dejado de salir por completo de la boca de Naoto. Ni siquiera tenía la fuerza para temblar más. Su respiración había disminuido exponencialmente entonces.

Parecía que estaba al borde de la muerte.

Carol estaba aterrorizada. Si la gente del Camino Shinkage atacara por la muerte de Naoto, Carol no sería capaz de manejar las consecuencias.

Sin pensarlo dos veces, Carol se armó de valor a pesar de su miedo hacia Harvey.

“¡Te daré exactamente un minuto! ¡Cura al Joven Amo Takei ahora mismo!”.

“¡Si no, te haré pedazos!”.

"¿Ah, de verdad? ¡Me gustaría ver cómo lo harás!”.

Harvey chasqueó los dedos una vez más.

El cuerpo rígido de Naoto se retorció violentamente después de escuchar el chasquido. Sus ojos se salieron mientras la sangre salía de sus orificios. Tenía una mirada de agonía en su rostro, como si dejara de respirar en cualquier momento.

Carol estaba horrorizada. Trató de amenazar a Harvey