"Los mafiosos de Siam siempre se han conocido como hombres despiadados. Sí Harvey los enfureció y se lo llevaron, ya es un hombre muerto".

"¡Deberías volver a casarte!".

Finn no dejaba de sonreír. Apenas podía esperar.

Según el acuerdo, esa basura de Harvey iba a morir pronto, ¿no?

¡Esa basura se atrevió a hacer que Finn se arrodillara ante él!

¡Definitivamente merecía morir a manos de esos mafiosos!

Al escuchar las burlas de todos, Mandy comenzó a desesperarse. Entonces se arrodilló frente a la Abuela Yates, llorando con pena: "¡Abuela! Por favor, ¡Harvey sigue siendo tu nieto político!".

"¿Lo has olvidado? Anteriormente, en tu cumpleaños, ¡él se esforzó por hacerte un regalo!".

"¡Aunque solo sea por ese motivo, por favor, haz que el tío lo salve!".

La Abuela Yates se burló. "¿Sobornar a alguien con una simple píldora? ¡Él debe estar soñando!".

"¡Mandy! Si todavía reconoces a los Yates como tu familia, entonces haz la vista gorda en este asunto".

"Espera hasta que se confi