Maiquel
—Amor ven que te prepare un baño relajante.
Escucho que dice mi luna, <<Diosa amo a esta mujer>>, me levantó de la cama y ella también, separa frente a mi toma la parte baja de mi musculosa y como ya se lo que va hacer levanto los brazos y ella saca la musculosa, deposita un beso en mi pecho sobre mi corazón. Me quito los tenis y ella me ayuda a bajar mi pantalón deportivo quedando en bóxer, me toma de la mano y me g
MaiquelNo puedo creer lo que ven mis ojos, mi luna es una hermosa loba blanca con unos impresionantes ojos azules, me acerco porque esta tirada en el suelo cansada por la transformación, acaricio su pelaje y ella ronronea por mi tacto.—Eres hermosa mi luna, —murmuro mient
Ágata—Celo. —Es lo único que dice entre gruñidos para volver a entrar su rostro en mi cuello.Una
ÁgataHoy es el último día de celos de Maiquel y mío, me acabo de despertar y Maiquel está acariciando mi cuerpo.—Tomemos un baño, —propongo porque me siento incómoda hace más de dos hora hicimos el amor y el nudo se formó. Cuando el nudo se forma, el eyacula como tres veces eso es mucho y me siento pegajosa, me toma de la cintura y me carga hacia el baño, abre la ducha y entra en ella para comenzar a lavar nuestro cuerpo.
ÁgataCuando me separo de Maiquel para poder respirar me da la vuelta y toma el jabón líquido, comienza a lavar mi cuerpo, sus manos están en mis pezones los aprieta con su dedo índice y pulgar, gimo y muevo mi cadera en círculo contra su erección mientras subo mis dos manos a su cabello, el jadea por el roce que le causa el movimiento de mis nalgas con su pene duro y caliente. ÁgataDespierto y siento los fuertes brazos de Maiquel acercándome a su cuerpo, ayer cuando llegue de la universidad Maiquel no estaba, no sé qué es lo que está pasando pero ya tiene dos semanas raro y yo estoy que cada día vómito todo lo que como, no le he dicho a Maiquel porque sé que está muy cansado con los asunto de las manadas, no quiero preocuparlo con mis asuntos.<Capítulo 21
ÁgataLlevo dos días encerrada como un animal en una celda en la cual hay un olor asqueroso. Solo me dejan salir para ir al baño y casi ni eso me permiten, lo único que no me deja volver loca son los pequeños latidos de mi bebé.Estoy triste porque no pude decirle a Maiquel que va hacer padre, aquí estoy sola en la oscuridad, desprotegida, no me puedo defender, mi alfa lo necesito tanto a mi lado. También me siento impotente por no poder hacer nada, estoy hambr
Álvaro— ¡Maiquel cuidado! —Escucho que grita la luna miro a ver qué pasa y veo como el que se hace llamar rey vampiro esta por atacar a Maiquel por la espalda << ¡Menudo cabrón! >> Pienso.En mi forma lobuno voy rápido hasta él y le doy con mi costado mandándolo hacía la pared, Maiquel me mira y me da las gracias.—Saca Ágata de aquí, —m
ÁgataDespierto cuando siento como algo tibio y suave da pequeño roces en mi pequeño vientre abultado, abro los ojos y veo que es Maiquel.— ¿Por qué no me has dicho que vamos a tener un cachorro?—Pregunta mirándome a los ojos con cariño.—Me entere el día que me secuestraron, —murmuro mientras acaricio su cabello, Maiquel sube hasta la altura de mi rostro y acaricia mi vientre, lo observo y veo que está desnudo y yo con una camiseta. Todos los recuerdos llegan a mi mente de golp