―Creo que estas exagerando con tu desconfianza hacia Frank, recuerda que èl estaba metido en los negocios cuando nosotros aun eramos niños o preadolecentes Dante, y tiene muchas cosas por alli de las cuales ninguno de los 2 conoce, quizas alguna de ellas termine por llamar su atencion y fue por eso que no pude venir… pero no creo que fue por que simplemente no quiso… ¿Quién rechazaría un viaje por unos días a un lugar como este? Y mas en el caso de Frank.

―Pues no lo se Rosalia, ya sabes como es èl, siempre hace locuras, 1 dia puede estar urgido por venir aquí y estar con todas las chicas casi sin ropa de la isla, pero otro dia distinto puede querer lo opuesto a ello… es muy impredecible el infeliz ―me dijo.

―Si, eso lo se, pero tampoco es que dudes tanto de èl de esa forma, quizas de verdad tuvo asuntos de negocios que atender y por eso no pude ir con nosotros… ahorita misma debe estarse lamentando por no haber podido venir y ver todo esto… sabes que… vamos a hacer que se arrepienta