POV Hanna.
Ya pasó más de un mes desde que recibí aquella devastadora noticia. Escuchar las palabras del médico a cargo de la operación de Leonardo se sintió como un centenar de dardos y flechas con fuego directo a mi pecho. ¡Perdí a otro esposo, aunque ésta vez no hay segundas oportunidades para estar con el de nuevo! Pensar que apenas hace unas cuantas semanas nos dimos la oportunidad de empezar de nuevo y estábamos en muy buenos términos como pareja, como individuos, como amantes... ¡Lo amo demasiado! ¡Me costará mucho superarlo!
- ¿Por qué no te das un baño y te arreglas para salir un rato? Llevas días encerrada, ¡eso no te hace bien! - dice Linda.
Linda es quien me ha acompañado desde la tarde que Leonardo falleció, tomó el primer vuelo disponible apenas le avisé del accidente.
- ¡De verdad no tengo ganas Linda! Aprecio mucho que estés aquí conmigo en vez de estar con tu familia - le digo sin ánimos aún en la cama a las 11 am.
- ¡Hanna por fav
POV Hanna.Mi vuelo partió dos días después, por suerte no tenía pasajeros a mi lado así que sería un vuelo silencioso. Sorpresivamente un par de asientos adelante vi la silueta de un hombre que se me hizo familiar, esperé el despegue y minutos después busqué la manera de tener su atención para asegurarme de ver su rostro, pero no fue necesario.- Srta. Le... ¡Sra. Angelucci! - me dice.- ¡ABBAS! ¡Qué sorpresa encontrarte acá! ¿Cómo estás? - efectivamente la silueta que había visto era el mismísimo Abbas Aldabas.- ¡Estoy bien! ¡Siento mucho tu perdida! - toma mi mano entre las suyas - ¿Cómo te has sentido?- Ha sido bastante difícil seguir adelante - le digo.- Te entiendo perfectamente.... No en el mismo sentido, refiriéndome a tu relación con el occiso, pero sé lo que se siente perder a un ser amado de forma repentina, y querer salir de la oscuridad que embarga la depresión.De repente sentí un escalofrío recorrer mi espina dorsal.
POV Hanna.Busqué a cada una de mis primas y retornamos a la zona sur de la ciudad para conocer un nuevo sitio nocturno de la ciudad que según los comentarios en las redes sociales era el boom del momento. Era el momento oportuno para darme un respiro y alejarme un poco de la depresión causada por la muerte de Leonardo.- ¿Tienen Reservación? - pregunta la chica encargada en la entrada.- ¡No, no sabía que era necesario reservar! - digo un poco decepcionada.- No es del todo necesario, ¿vienen al área del restaurante o del bar? - nos pregunta la encargada.- Venimos a comer y a tomar algo - le respondo.- Excelente, síganme - entramos todas y la seguimos - ¿Prefieren acá adentro o en la terraza?- Me gusta este ambiente, ¿pero podemos ver la terraza antes de decidir? - le pregunto.- ¡Con gusto! - la encargada nos guía hasta la terraza y todas coincidimos en que nos gustaba más estar en afuera.Pedimos la carta y unos tragos
POV Hanna.Conduje hasta mi nueva casa dando por hecho que la noche aún no terminaba. Tenía la necesidad de compartir con mis primas, de tomar y desahogarme, apenas había pasado poco más de un mes que perdí a Leonardo y aún no me acostumbraba al hecho de que ya no está.- ¡Bienvenidas! - digo al acercarnos a la enorme cerca de piedras y activo el control remoto para abrir el portón - Esta es la famosa casa de la que les hablé.- Hanna es muy bonita! - dice Jolie.- Espera a ver el interior! - digo, me estaciono y las invito a pasar a la casa.- Ay que espectacular! ¡Parece de revista prima! - dice Mary.- ¡De verdad que sí! – digo contemplando el excelente trabajo de Luis y de su socio Arquitecto y obviamente de todo el equipo de trabajo en general.- Está bonito ese cuadro - dice Gina refiriéndose al gran retrato donde podamos juntos Leonardo y yo.- ¡Gracias! - y ahí estaba de nuevo el nudo, pero no le permitiré ahogarme - Buen
POV Hanna.Era sabado por la mañana, a pocas horas del mediodía un fuerte dolor de cabeza me despierta. Miro a mi alrededor y estoy en una habitación que luego de visualizar y concentrarme un poco me di cuenta que era la habitación de huéspedes de la planta principal de mi nueva casa. Trato de recordar cómo llegué allí, pero es imposible. Me quito la cobija que cubre mi cuerpo y llevo puesta una inmensa camiseta de hombre, la camiseta que traía puesta Abbas - ¡Oh no no no no! ¿Que hice? - exclamo aturdida y salgo de la habitación. Por suerte me encuentro con Jolie y Gina en la sala con la misma cara de destrucción.- ¿Qué pasó anoche? - pregunto desorientada.- Jajajaja primaaaa que te pasaste de tragos! ¡Eso pasó! - dice Jolie.- Si! ¡Ya sé que me pasé de tragos! ¡El dolor de cabeza me está matando! - digo quejándome - En qué momento se fueron Abbas y sus amigos?- Se fueron después que casi te ahogas en la piscina, te estabas quedando dormida -
POV Hanna.Subimos en el elevador hasta el apartamento, al entrar, se veía como si en cualquier momento Leonardo saldría del gimnasio, o de su guarida o simplemente me sorprendiera de espaldas con un abrazo, pero era una probabilidad completamente nula que empezaba a aceptar.- ¡Mi niiiiñaaaa! - Luisa sale de la cocina directo hacia mí - No sabía que vendrías! - me abraza y llora en mi hombro desconsolada y no podía emitir ninguna palabra - Mi niño! Leito se nos fue! - me mira como buscando alguna respuesta de mi parte.- ¡Lulu! - solo pude decir eso y llorar con ella.Luego de algunos segundos ambas nos secamos las lágrimas e invité a las chicas a pasar a la habitación a probarse la ropa con la que se sintieras más cómodas. Luisa quería ponerse al día con todo lo acontecido, pero le expliqué que teníamos un compromiso y que estábamos retrasadas pero que pronto iría a visitarla. Leonardo le pidió a Luisa cuidar del apartamento durante nuestra estancia en los
POV Hanna.Llegó la media noche, y nos entregamos a un profundo sueño mientras se reproducía una película. Por suerte no desperté en toda la noche hasta la mañana siguiente.Pasó el fin de semana, un domingo muy tranquilo en casa conversando y viendo películas, hasta que llegó el esperado lunes para encontrarme con el abogado de Leonardo. Escogí un atuendo casual con un blazer y me dirigí al bufete de abogados que indicaba la tarjeta.- Buenos dias, el Dr. Sánchez por favor - me anuncio en la recepción.- ¿Quién lo busca? - me pregunta la secretaria.- Hanna Lee... Hanna Angelucci - le digo y la chica me mira con asombro.- ¿Sra. Angelucci?, el señor Sánchez ha estado tratando de comunicarse con usted, ya misma la anuncioLuego de escasos minutos me indica la oficina e ingreso a ella, y ahi estaba, Julio Sánchez el abogado de mi difunto esposo y de "La Organización".- ¡Hanna! Por fin! Ha sido una odisea ubicarte - me tiende la mano -
POV Hanna.Me fui a mi casa, tenia que descansar, despejar la mente y procesar toda la información que recibí hoy. Aparte de eso, encontrarme con Adolfo fue realmente oportuno, me relajó su compañía, creo que seria buena poder reconectar, a fin de cuentas, fuera de lo sexual, teníamos una muy buena relación.- ¿Y esos ramos de rosas? - Le pregunto a Gina al entrar a mi casa.- Te cuento... Uno me lo envió Ali, el otro es exclusivamente para ti, y por razones obvias ves la diferencia - Dice señalando el gran arreglo - Éste es el tuyo.- ¿Ah si? veamos - tomo la tarjeta del gran ramo para leer en voz alta la dedicatoria.¿Alguna vez has estado enamorado de alguien a quien no te atrevías a decírselo? No sé qué es lo que debería hacer, si decirle lo que siento o esperarme a que vea que ella también me quiere.A veces los sentimientos, por mucho que nos gustaría poder alejarlos, vuelven y vuelven una y otra vez, y no hay nada que podamos hace
POV Hanna.Luego de la reunión con los líderes de la organización, dónde anuncié mi rechazo al puesto heredado, Abbas me invitó a salir. ¡No tengo nada que perder!, soy una mujer adulta e independiente, no debo rendirle cuentas a nadie, siempre y cuando no moleste a nadie todo está bien, así que creo que puedo ir dando pequeños pasos para ver a donde me lleva esta nueva aventura amorosa.- ¿Cómo estas? - Le pregunto de nuevo a Abbas al subir a su auto.- ¡Mucho mejor ahora con tu presencia!- Me agrada saberlo... ¿A donde iremos? - le pregunto emocionada y nerviosa a la vez, quiero ser lo mas natural posible.- ¿Qué te parece conocer algunos museos moderno?, o tal vez el cine, puedo enseñarte la ciudad... tu decide - me dice.- Ummm, ¿es posible ir al Parque Central? - le pregunto con timidez recordando nuestra primera cita y mis intenciones.- ¡Por supuesto, te encantará, luego podemos ir al mirador del Empire State,