Parte 5...Respiro con fuerza y sostengo su cara entre mis manos y aumento el beso, pidiéndole más, que lo devuelve y esto me hace sentir como si estuviera en una montaña rusa, pero siempre subiendo.Sin darme cuenta, suelto un suspiro contra su boca y siento su mano en mi pierna. Su tacto me calienta la piel y me hace desear que sus manos recorran todo mi cuerpo.Incluso puedo creer que es inexperta, dada su forma de actuar ante mí, pero sé que eso no significa santidad y mi curiosidad y atrevimiento aumentan.Aproveché el momento receptivo y bajé una mano hasta su cintura y la apreté, tirando de ella encima de mí definitivamente, colocándola en mi regazo y continuando el beso. Mordisqueé su labio y bajé mi mano a su culo, apretando, pero ese fue mi error.Se apartó, respirando con dificultad y puso sus manos en mis hombros, haciéndome parar.- No, no, no... Basta ya. - Dije en voz baja, temblando.- ¿Qué pasa? - Fruncí el ceño. No quiero parar.- No puedo hacer eso... - Se apartó a
Parte 6...Está bien. Me paso los dedos por el pelo y me alejo del calor, entrando en la cocina. Vuelve a juguetear con los productos que dejó en la encimera. Nuestras madres se acercan, charlando y quejándose de algo a lo que no presté atención.Toda mi atención se centra en sus bien hechas piernas y en lo poco que asoma bajo sus cortos shorts. Tengo que admitir que es muy bonita. Está en casa con un atuendo sencillo, el pelo suelto de cualquier manera y una zapatilla rosa en los pies y aún así se las arregla para ser encantadora y atractiva.Será agradable tenerte en mi cama. Durante un tiempo.- Tina, ¿podrías servirnos un poco de ese jugo que hiciste? - preguntó su madre, sentándose lentamente.- Claro, mamá -se detuvo y fue al armario, sacando vasos y me miró- ¿Quieres tú también? Es naranja.- No, gracias", me crucé de brazos y me apoyé en la pared.Se encogió de hombros y sirvió el zumo para mi madre primero y luego para la suya. Puso el resto de la compra en cada sitio y duran
Parte 1...CristinaHe visto bien el coche en el que venían. Este fue más discreto y espero que cuando venga a recogerme más tarde, no venga con otro que llame la atención. Prefiero irme en paz, sin que los vecinos vean mi vida y cotilleen después.Sentí que mi estómago se tensaba y tiraba. Estoy nervioso. No debería haber aceptado la invitación a salir, pero lo hice, ahora se acabó. Me muerdo el dedo, empezando a morderme la uña. Mierda.Tal vez debería llamarlo. Pero no tengo el número. Puedo preguntarle a Pauline. Giro la boca de un lado a otro. Pero si le pido su número, sabrá que estoy interesado.¿Lo soy?Por supuesto que sí. De lo contrario, no habría devuelto el beso ni aceptado la invitación. Empiezo a ponerme más nervioso por la posibilidad de salir con él más adelante. ¿Y las citas?No me gusta eso, sentirme inseguro. Lo quiero y no lo quiero al mismo tiempo. Odio sentirme así y es su culpa. Norton es mayor que yo, y puede tener a quien quiera. ¿Por qué se ha metido conmigo
Parte 2...Aproveché los zapatos que me regaló Pauline y me los puse de nuevo. Creo que ha encajado bien. Mi problema es la bolsa. No tengo ninguno que haga juego con el vestido. Cuando me lo puse, pedí prestado un pequeño bolso a la vecina de arriba. Ahora va así, sin bolso. Mis cosas están en la bolsa normal que uso para ir al trabajo, pero la dejaré en el coche con la bolsa grande.Me perfumé, me maquillé ligeramente, porque ni siquiera sé cómo maquillarme bien con estos looks de noche y de fiesta. Siempre uso lo mismo. El lápiz de labios rosa claro hacía juego con el tono del vestido.Bajé los hombros y suspiré, echando una última mirada. Creo que está bien. Si no le gusta, es su problema. Haré lo que pueda.— Adiós, mamá", abrí la puerta.— Ve con Dios, querida.Ella no dijo nada, pero por supuesto sabe que soy así para salir con Norton. Bajo los escalones con todo el cuidado del mundo. Sólo falta que me resbale y me ponga ahí abajo.Va a ser el comentario de la semana o quizás d
Parte 3...Sacó la silla para que me sentara y se sentó a mi lado. La chica salió y dijo que nuestro camarero estaba llegando. Él le dio las gracias y ella se marchó con una sonrisa cortés.Nunca he estado en un lugar como este. Sé cómo comportarme y puedo comer bien, siempre que no pida algún plato raro con el que tenga que hacer malabares para comer.El camarero llegó, nos dio las buenas noches y nos entregó los menús. Ni siquiera conozco la mayoría de los nombres, pero me fijé en los precios. Lo sé, es una tontería, soy un invitado, pero es la fuerza de la costumbre.Pidió las bebidas, pero para mí recordó que voy a trabajar en un hospital y pidió una bebida sin alcohol. También le dejé elegir la comida. Seguro que tiene buen gusto.El restaurante es italiano y su padre era italiano, así que debe conocer bien los platos. Además, estoy tratando de contener mi ansiedad por lo que está por venir.— ¿Por qué no hay más gente aquí?— Esta zona está reservada. Te llamé y te pedí que lo r
Parte 4...Terminé el postre casi como un robot porque mi cuerpo funcionaba por sí solo mientras mi mente seguía perdida. La música de fondo cambió, pero seguía siendo romántica. Empezamos a hablar de lo que nos gusta y lo que no, incluso me reí con algunas cosas que me contó de sus hermanos y de él cuando eran adolescentes y que ponían los pelos de punta a sus padres.Poco a poco me fui relajando a su lado. Me estaba gustando la forma en que me hablaba e incluso parecía que nos conocíamos desde hacía más de unos días.Me cogió de la mano, me puso en pie y nos fuimos a un rincón más oscuro de la zona. Me sujetó por la cintura y empezó a bailar lentamente al ritmo de la música que sonaba y yo le seguí.Ni siquiera me di cuenta cuando apoyé mi cabeza en su hombro. Era tan bueno que no quería pensar, sólo disfrutar. El diablillo al que comparaba con Simone estaba en mi hombro, soplándome al oído para que disfrutara de la noche antes de que se acabara.********** **********Lo siguiente q
Parte 5...Creo que el corazón se me va a salir por la boca en cualquier momento o me va a explotar dentro del pecho. Me estremecí cuando apartó mis bragas y su dedo penetró en mis pliegues, encontrando mi punto caliente de placer, que palpitaba para él.Su dedo se deslizó más adentro y sintió mi humedad. Tragué con fuerza, respirando rápidamente. Movió su mano, su dedo subiendo y bajando al igual que mi pecho con mi agitada respiración.Me miró fijamente durante un momento y su mirada fue penetrante. Me besó con fuerza, exigiendo mi retribución, nuestras respiraciones jadeantes en el mismo modo y con la misma urgencia. Era tan bueno que no podía pensar, sólo sentir.Entonces su dedo se deslizó más abajo y sentí que penetraba en mi carne, provocándome una fina punzada de dolor, pero no era algo fuerte, era leve, pero suficiente para hacerme despertar del sueño y salir de las nubes, volver a la realidad de lo que estaba haciendo.Dónde lo hacía y con quién. Me impactó y giré la cara. L
NortonJoder, estoy muy cabreado por lo que ha pasado hoy. No salió como lo había planeado. Al menos no todo.Oh, mierda. Le di al colchón. Golpeé el colchón. Llevo casi una hora mirando este techo blanco, observando cómo un mosquito vuela de un lado a otro, decidiendo si me va a chupar la sangre o no.Resoplé con rabia. Quería gritar, pero si lo hacía mi madre me oiría y no estoy de humor para una conversación. Debería haber ido directamente a mi piso en lugar de volver aquí.Mi madre está bien, la casa está llena de sirvientes. Podría quedarme allí, en mi rincón, al menos hasta mañana. Tonto.Mi teléfono móvil suena y vibra al mismo tiempo. Alargo la mano para ver quién es y el nombre de Norman aparece en la pantalla. No es un buen momento para hablar, pero supongo que es la única manera de liberar mi ira.Aprieto las cejas y con un profundo suspiro respondo.— Adelante, Norman.— Adelante. ¿Sigues en la empresa?— No, estoy en casa de mamá.— Sólo te llamo para decirte que ya te he