— Los desterrados estaban en posición, no era la primera vez que ellos entraban en ataque, es más, llevan 4 territorios conquistados en dónde ellos eran la cabeza del ataque, ellos tenían ideado cada paso a dar y esta noche era prácticamente lo mismo, aunque no fue ideado, ellos ya saben como conquistar un territorio, sus instintos salvajes y asesinos los dominaba devorando todo aquello que se interpusiera en sus caminos.— Los lobos de Rosas de Luna quizás solamente sean una víctima más, pero no había nada que hacer, entonces se dio la colisión, la colisión de los desterrados con mirada asesina y los lobos que solamente seguían órdenes, los filosos colmillos de los desterrados arrancando la piel de los guardias de Rosas de Luna quedaba ante la vista de Seúl, los pícaros los acababa sin dudar.— Aullidos que generan temor en los guardias, sangre que manchaba el pelaje de los lobos, los guiados por Killian Vankfort eran adiestrados para atacar de manera contundente, sin elegir víctima,
— Estaban tentando al Diablo, un diablo que aún no conocían, una Loba Blanca que no conocían cuyas cualidades asesinas estaban por salir a la luz, el Alfa de los Alfas analizó a la loba por escasos segundos, pero está se había lanzado con dirección al Alfa sin preámbulos la mente de Lillith era poderosa y enlazaba fácilmente al Alfa, mientras que 3 miembros de la Hermandad habían llegado - Atajen a Rox y si la sueltan los mato - La poderosa voz de la loba hizo que los guardias recién llegados obedezcan su orden, mientras Killian ya se encontraba atendiendo a los heridos.— Beta, tenemos muchas amenazas aún por los alrededores - Informó un guardia a Killian se notaba la preocupación en el rostro del hombre, mientras el Beta realizaba el recorrido correspondiente para asistir a los heridos y ordenar preparar una digna sepultura a los miembros de la hermandad que han muerto, pero antes de brindar cualquier orden Killian había ido en busca de Seúl, puesto que la fragancia del Alfa se sent
— La furia había tomado cada milímetro de sangre de Lillith y aquello la impulsaba a ser más salvaje, la loba tenía la sangre goteando de su hocico, puesto que incluso sus colmillos dañan su lengua, segundos después había soltado un aullido y arremetió con fiereza por el cuerpo del Alfa, este sorprendido por la fuerza de la Loba había dado 3 segundos de ventaja para que los colmillos de Lillith le provocará una mordida en el cuello, fue allí que el Alfa reaccionó y con un rugido de por medio también había logrado encajar sus colmillos, pero en el brazo de la loba.— La Herida provocada por el Alfa no era tan grave como la que él tenía en su cuello, la sangre cayó al suelo, Lillith se había apartado esperando que el Alfa la ataque otra vez, pero esta vez habían vuelto a quedar frente a frente desafiándose con la mirada— Te saldrá caro herirme loba de cuarta - se escuchó la voz del Alfa a través del enlace, aquello hizo que la loba se impulse nuevamente sobre sus patas y el Alfa esperó
- Lillith miró a los guardias y a Rox, la loba fue fulminada con la mirada por Lillith - Déjenla conmigo - Rox, tembló al escuchar las palabras de Lillith, la loba acababa de matar al Alfa de los Alfas, con aquella muerte podría desatarse el Infierno, Rox ya no tenía dudas de que Lillith no iba a dejar pasar absolutamente nada y que acabar con su vida para la Loba Blanca sería demasiado fácil - ¿Me tienes miedo? - Rox fue sostenida de manera fuerte de las muñecas por Lillith ambas mujeres estaban frente a frente, Rox seguía temblando mientras su mirada fijaba la mano de Lillith que tenía la sangre seca del Alfa por sus dedos.— Suéltame - Alcanzó a decir Rox.— No quiero soltarte puedo sentir la fragancia del miedo en ti, eres demasiado cobarde, para mi hombre eres muy poca cosa - Lillith la empujó con fuerza logrando que Rox se golpee de manera fuerte por el suelo, pero Lillith no la dejó ir - ¿Sabes quién tiene el control ahora? - Rox era sumisa ante Lillith - ¿Lo sabes? - Su voz ca
— No porque quisiera, pero mirar a la persona que tenía ante era considerada una falta de respeto, puesto que nadie podía verle el rostro a la mujer que estaba cubierta por una capa Roja en su totalidad, y es que la persona que estaba ante Saúl era la Diosa Luna.— No he tenido una vida fácil mi Diosa - El Alfa cerro los ojos - Esperó que no se te olvide que mi padre ha matado a mi madre, mi hermano mellizo había muerto, tenía todas las enseñanzas para ser un gran Líder, pero mi hermano ha utilizado trucos para que mi ladre me destierre.— Nadie tuvo una vida fácil, Saúl, para convertirme en Diosa, yo caminé por el Infierno, el calvario que he vivido me llevo a ser un Licántropo, y el hecho de que seas desterrado no te hace menos líder, pero tu cambiaste de dirección.- ¿Que pásaste para ser Diosa? - Saúl sin mirar a la mujer había cambiado la dirección de la conversación.- Ninguno conoce de la historia de la Diosa, ustedes simplemente me veneran por brindarles el Verdadero amor, per
— Yo no soy de ti ni de nadie - Lillith se deshizo del agarre de Killian - Te recomiendo que vayas a ver a tu loba y a mí me dejes en paz - Su voz ocultaba aquello que realmente estaba sintiendo.— ¿Estás segura de que quieres eso? - Killian la sostuvo nuevamente de la muñeca.— ¿Acaso vas a darme lo que quiero? - Lillith se burló - Nadie puede darme lo que yo quiero, porque no hay nada que yo no pueda conseguir por mí misma - el Beta ejerció aún más fuerza en su agarre acercando su rostro al de Lillith.— Eres muy creída— Killian se burló - Pero bien tú ganas, solamente esperó que no Andes llorando después muriéndote de celos - Killian soltó a la mujer.— ¿Y de quién voy a estar celosa, de la loba esa? - Esta vez fue el turno de la loba de burlarte aunque su temor era que la Diosa hiciera que se mordiera la lengua porque efectivamente había experimentado el sentimiento denominado celos - La loba no está a la altura de ser rival para mí, y tú tampoco estás a la altura de una loba Bla
— De un momento a otro el sol se había dejado ver, el amanecer había llegado y la rara sensación había desaparecido - Ha llegado un nuevo día - Murmuró Lillith decidiendo soltarse del agarre de Killian.— Ha llegado un nuevo día y con ella debemos de dejar en claro muchos asuntos - El hombre había tomado el camino que lo llevaba hasta la casa de la manada de Rosas de Luna con Lillith siguiendo sus pasos, pero había algo más oculto en la mirada Azul de, sus pasos por el suelo de aquella manada era un recordatorio de que en la misma se habían aprovechado de su debilidad, le habían dicho que no estaba a la altura de ser la Luna de aquella manada.— Recuerda que el nombre nuestro no es en vano, representamos un Demonio Maligno oculto, misterioso, aquello que nos demostrará que el Negro también es arte, arte como el color de la Sangre de nuestra mirada, somos el espíritu que nació para ser Luna, pero nos convirtieron por arrogancia en desterradas, pero no olvides que el mismo rechazo no no
— ¡Lillith! - Susurró Killian rindiéndose ante la cercanía de la loba, entonces estiró sus brazos envolviendo a la loba, Lillith se había puesto rígida ante la acción del Beta, aquel abrazo había puesto a temblar el corazón de los dos, la barbilla de Killian se posó por encima de la cabeza de Lillith.— ¡Killian! - Rombel los había interrumpido - Saúl se encuentra rondando ¿Qué haremos con el Alfa? - La pregunta de la loba tenía sentido, había mucho camino que recorrer aún y mucho que aclarar aunque Rombel no quería interrumpir aquella rara atmósfera entre Killian y Lillith debía hacerlo con Saúl cerca, el peligro también estaba cerca.— Solo ordena que los patrullajes se intensifiquen y que el primero que sienta la cercanía del Alfa no dude en hacerme saber - La voz de Killian en su voz de Beta era igualmente poderoso que la voz de un Alfa - Pero mientras tanto quiero que Seúl Depolo y su ladre estén en el calabozo - Aquella orden hizo que la pequeña loba mirase fijamente al Beta, pe