Al estar fuera María estaba en mi camino – oh así que escuchaste todo – la mire con cierta ira – tú … no pensaste que lo olvide ¿Verdad mi arcángel oscuro? –

Fui interrumpida por un golpe en mi mejilla – por favor Artemis, sabes que fue por tu bien ¡No hagas idioteces! – temblé en cuanto la vi atraparme – vamos si deseas matarme… tendrás que ganarte el derecho a ello– sentí sus labios rozando los míos y forceje hasta que no pude mas y correspondí por el cansancio

Una vez paro la empuje – ¡No vuelvas a tocarme!... por favor – mi voz era débil pero aun así audible  

Ante mi tono casi suplicante por ayuda Lotto salió y se puso enfrente de mi para protegerme – ¡mierda chica! … veo que aun le temes a esa lunática, y en torno a ti – miro a mi agresora atentamente – quizá tengas poder, pero no dejas de ser un trozo de b****a en este mundo… eres justo como aquellos a los que encarcelo –

Mi creadora sonrió burlesca en definitiva esto saldría mal –  no olvides con quien te metes querida, por si no lo notaste este es un terreno peligroso para alguien de tu nivel pequeña gatita mala – le intento hacer un corte.

Pero la oficial alcanzo a torcerle la mano – no te atrevas a tocarme… tú desecho humano –

Gracias al miedo las separe – por favor… basta, esto es mi culpa y lidiare con mi castigo como es debido – pese a todo el dolor que sentía no pensaba permitir una muerte mas – mi arcángel oscuro… soy la semilla de la desobediencia por lo cual le pido me reprenda por ambos crímenes en su contra – me arrodille esperando se apaciguaran ambas mujeres

Por desgracia Lotto no tolero esto y me obligo a levantarme – ¡Chica no es momento de doblegarse!, sabes que por este rumbo serás asesinada sin probar la libertad y aunque te odie en un principio se que… no eres tan mala, no después de todo lo que viviste así que acabemos esta locura –

María sonrío e hizo sonar la campana rápidamente – llévensela a su cuarto, y tu B12 ¡Ven conmigo inmediatamente! – su mirada denotaba ira así que la seguí totalmente impulsada por el miedo

Logre ver de reojo como aquella que quiso ayudarme lloraba y forcejeaba, una parte de mi deseaba ayudarla… aunque por otro lado aun me esperaba un castigó  quizá aún peor que el suyo, me dispuse a avanzar cuando María freno de golpe su andar dando un pequeño giro antes de sacar el control y apuntar hacia mi para poder propinarme una descarga que casi me noquea, apenas alcance a medio quejarme pues

Luego de ello me abrazo – sabes Artemis siempre fuiste muy débil, y eso te vuelve una flor muy bella – sentí como me beso, pero no importaba… de cualquier modo no lograría defenderme, aunque lo negara pelear era contraproducente en aquel momento… sin duda sería problemático intentar algo

La señorita Lotto estaba furiosa, así que se zafo y golpeo a nuestro arcángel oscuro… con mi captora –¡Ni siquiera te atrevas a tocarla nuevamente si deseas vivir maldita bravucona! –

Apenas podía moverme – por favor… basta – me dolía mucho el cuerpo… en si el hecho de respirar era agonizante – no debes morir por mi culpa… tienes una razón para vivir aun – con trabajos logre acercarme

Mi creadora lucia furiosa así que volvió a dar la orden de modo definitivo, aunque está vez se haría cargo de castigarnos hasta que aprendamos – bien gatita – obligo a su reciente adquisición a mirarle los ojos – te diré una cosita chica rebelde… después de ser castigada veras lo que es realmente nuestro mundo … justo como yo – la soltó suavemente mientras los “perdidos” la arrastraban hasta la sala de tortura – realmente odio la rebeldía, como sea tu mi dulce Artemis vendrás conmigo – pude notar algo extraño en su voz – ¡Vamos levántate! – me colocó esposas y luego las unió a otra cadena, tras esto tiro de ella con brusquedad – apresúrate o será peor para ambas –

Debido a lo cansada que me encontraba simplemente la seguí lo más rápido que mi tambaleante andar permitía, era irónico hace unos minutos mencione que yo la mataría y ahora … soy la presa nuevamente – mi señora por favor, le suplico no la lastime a ella… esto fue mi culpa – sentí coma tiraba descuidadamente de la cadena y caí justo a sus pies

Su rostro tenia un tinte muy sombrío,  era casi como si la simple mención de la oficial la hiciera enloquecer en irá – Artemis cariño se que me odias, y no me molesta … pero lo que si me fastidia es que quieras protegerla, dime ¿Acaso la amas? –

En ese segundo fue que lo note por fin y un miedo extraño me invadió – no mi señora… me es prohibido desarrollar ese tipo de emociones por una paciente – apenas podía retenerle la mirada – solo creí que me seria útil en algún momento, por favor no lo mal interprete mi intención – el ambiente pareció relajarse un poco y luego … allí estaba otra vez su sonrisa burlona y su toque helado… en algún punto sentí su respiración fundirse con la mía… antes de aquel beso, ella actuaba posesiva mientras yo suplicaba parara pronto – agh no respiro bien – apenas podía hablar breves segundos, podía sentir una mezcla de asco y deseo recorrerme… realmente comenzaba a odiarme por sentir tales cosas

Para mí suerte una vez se canso me tiro – sabes realmente odio tu anarquía y rebelión pues es como lidiar como una versión infantil e ingenua de mi misma, y detesto eso… tu inocencia me enferma – simplemente soltó la cadena y se dispuso a irse, debía actuar rápido y…

Pese a que me encontraba aturdida, tome aquella cadena que me retenía antes y la coloque a prisa alrededor de su cuello… en el fondo deseaba matarla, aún así no era tiempo para ello – no dejare que sigas haciendo esto… simplemente esta mal – logre dejarla inconsciente, me dispuse a buscar a los oficiales, aunque para mí desgracia necesite cambiar mi plan aceleradamente… venían por mi así que empecé a huir lo mas rápido que podía, en varias ocasiones la cadena se volvió mi enemiga… hasta que llegue a la ciudad… las pocas personas que tope me miraban con desprecio o indiferencia… aquí estaba rodeada por lo desconocido, pero antes de lograr huir correctamente fui sedada y perdí noción de todo… era como si el vacío me absorbiera una vez más… y nadie lo sabría… nadie ayudaría… sería olvidado igual que todo sobre ellos… igual que cada crimen cometido

Al despertar escuche pasos suaves cerca de mi y luego de un tiempo percibí mi postura… habían encadenado mis manos al techo – me atraparon y ¿bien? No pueden herirme mas- reí con la intención de contener mi frustración – solo mátenme ¡Ahora! – sentí lagrimas en mi rostro y un extraño deseo de acabar con todo recorriendo en mi interior – por favor frénalo… no soy tu títere –

Y estos solo crecieron al mirarla, su rostro lucía sombrío e ilegible, aunque lo único que me resultó lindo de esto es que estaba acompañado de la marca de mi cadenas en su cuello – veras querida aun tengo planes para ti… pese a todos tus actos de traición y rebeldía eres una flor única– su modo de hablar era sereno y arrogante como siempre, sin embargo algo activo mis sentidos de alerta cuando tomo ese fino bisturí – te diré algo… a ti cariño mío no te matare, no es adecuado matar mi mejor experimento… pero te hare recordar donde perteneces –

En cuanto la vi acercarse sonreí – oh vamos ¿De nuevo pretendes torturarme? En este punto logre perder todo menos mi humanidad, anda felina – baje la mirada y comencé a reír de un modo casi ahogado – dáñame de nuevo… al final te hare pagar por todo esto, no importa si hacerlo toma mi vida o lo poco que me queda de humanidad… ya me he jurado acabarte –

La note aburrida – buen discurso, pero creo que olvidas algunos detalles cariño – tiro de la cadena de mi collar generando que esta contraste con las de mis manos y me duela en sobremanera por lo abrupto y brusco que fue el movimiento – en este momento tu eres mi propiedad, y no tienes derecho a desafiarme – lucía furiosa sin duda alguna… y actuaba aún más posesiva que antes, era casi como si quisiera venganza de mi