Capitulo 269 —Soy la madre de Jeremy. —Está bien, mamá —Lena estaba muy contenta porque Claudia siempre estaba de su lado—. Ya nos hemos dado mutuamente nuestras muestras de amor. ¡Estamos prácticamente comprometidos! —dijo tímidamente—. ¡Una vez que Noé esté libre después de su semestre el año que viene, nos casaremos y tendremos hijos! ¡Mamá, te daré tres nietos! Claudia sonrió alegremente y dijo: —¡Claro! No te canses, cariño. Si ya no quieres actuar, ¡no lo hagas! Puedes gastar todo mi dinero en el futuro. —Oye... ¿No crees que eres parcial, mamá? —intervino Camila—. ¿No vas a dejar que sea yo quien gaste tu dinero? Al oír eso, Claudia se volvió hacia Camila y le respondió: —¡Casi me olvido de que todavía estás aquí! Reflexiona sobre ti misma, ¿quieres? Tu hermano ya se casará el año que viene. ¿Y tú? —¿No pasa lo mismo con Jenifer? —respondió Camila. —Al menos Jeni tiene novio. ¡Tú sigues soltera! —dijo Claudia disgustada—. No te estoy pidiendo que te cases. Pue
Capitulo 270 ¡Vacaciones arruinadas.! —Aun así, él es tu hijo biológico. Aunque han estado separados durante mucho tiempo, apuesto a que todavía te extraña —la consoló Claudia. Sandra conversó con Claudia por un rato antes de recibir una llamada telefónica que le decía que tenía que irse. —Como no traje regalos, quiero que te quedes con esto —Sandra le pasó una bolsa a Claudia—. Considéralo como mi regalo de compromiso para Camila. Claudia se negó a aceptar el regalo. —¡No puedo aceptar esto! Ni siquiera la conoces. Guárdalo para la próxima vez que la veas. —¿Me tomas como una extraña? —No es eso lo que quise decir. —Entonces quédatelo —Sandra insistió, obligando a Claudia a aceptar el regalo—. Y recuerda, Jeremy tiene muchos defectos, así que ten paciencia con él. Estoy segura de que cuidará bien a Camila. Claudia respondió rápidamente: —No. Jeremy es una buena persona y muy inteligente. —¡Te visitaré nuevamente en el futuro! La llamada que Sandra había recibido
Capitulo 271 ¡Son unas pésimas amigas! —Olvídalo. Dejemos que nos acompañe —intervino Verónica —. Y que se mantenga alejado de nosotras. Será nuestro mayordomo cuando vayamos de compras. —¿Qué? Soy demasiado guapo para ser solo un mayordomo —dijo Edwin. —¡Oh, por favor! —Hada le lanzó una mirada furtiva—. ¿Crees que eres una estrella de cine o algo así? —Cariño... —Edwin se llevó la mano al pecho y sollozó—. Apuesto a que ya no me amas. Los labios de Camila se crisparon en una mueca pero. Ya que Verónica ya había aceptado, ¿qué más podía decir? Cuando subían al barco, ella no pudo evitar preguntar: "¿Estás seguro de que eres el único que vino?" —¡Por supuesto! Solo vine porque estoy preocupado por Hada —respondió Edwin con indiferencia. Estaba diciendo la verdad, había ido solo. Lo que ella no sabía era que Jeremy y Sebastián habían subido al barco hacía mucho tiempo. "¿No está aquí?" Camila aún sospechaba. —Oh... ¿Estás hablando de Jeremy? —Edwin arqueó una cej
Capitulo 272— Estrategia. —Tsk, tsk. Eres el ejemplo perfecto del orgullo —se burló Edwin—. ¿No dijiste que irías a Sorent? Y al final, viniste aquí. Jeremy respondió con indiferencia: “Edwin, Sebastián es el principal proveedor de ambas empresas que cotizan en bolsa. Si algún día decide dejar de abastecerte, estoy seguro de que no tardarás mucho en declararte en quiebra. Yo siendo tú, recogiera esa lengua larga tuya”. Edwin retractó su sonrisa y le sirvió una taza de café a Sebastián mientras le decía en tono halagador: “¡Toma un poco de café, Sebastián! ¡Jeje! Por favor, discúlpame por ser ignorante e inmaduro”. Sin embargo, Sebastián ni siquiera se molestó en responderle. Pronto llegó la comida y toda la mesa estaba repleta de platos, la mayoría de los cuales había pedido Edwin especialmente para Hada. Después de eso, se apresuró a llevarle un poco de carne asada asu plató. “Toma, nena, prueba esta carne asada”. “Cariño, prueba estos deliciosos espaguetis con albóndigas. “
Capitulo 273 —¡Ya terminamos!.—Mira esto —instó Sebastián.Desconcertada, Hada abrió el álbum de fotos del teléfono de Edwin. Cuando sus ojos se posaron en algunas fotos en particular, se abrieron de golpe. Procedió a desplazarse por el historial de chat de WhatsApp de Edwin. Después de mirarlo todo, le salía vapor de las orejas.“¡Edwin González!”Jeremy soltó a Edwin y se hizo a un lado. Apenas Edwin levantó la cabeza con la salsa por toda la cara, recibió una taza de café en la cara.Hada no se contuvo y le lanzó otra tan furiosa que su pecho se agitó violentamente. “¡Qué desvergonzado y despreciable eres al tomar esas fotos! ¡Voy a romper contigo!”.Al ver el teléfono en sus manos, Edwin maldijo a Jeremy por dentro. “No es nada. Son solo fotos de muslos y pechos. Simplemente disfruto admirando la belleza…”Hada le arrojó el teléfono de inmediato y le gritó. “¡Eres un completo depravado! ¡Nos vamos a separar y tú te vas de mi habitación!”.Luego se marchó furiosa.Edwin giró la
Capítulo 274 — ¡Una broma! —Sé lo que estás pensando. Si te atreves a comprar JR Entertainment, cerraré todas las empresas que estén bajo tu nombre y te obligaré a mendigar en las calles durante un año o dos —Sebastián clavó sus ojos de ébano en Edwin, con advertencia. —¿Tienes que ser tan cruel, Sebastián? —Es que a veces parece que te falta un tornillo en la cabeza —explico Jeremy—. No podemos adquirir una empresa que vale tanto dinero y luego no poder recuperarlo por una estupidez. Pero puedo prestarte una actriz —Jeremy le dio una palmadita a Edwin en el hombro. Edwin estaba a punto de negarse, pero al ver la profunda sonrisa en el rostro de Jeremy, comprendió de inmediato. Sonrió y exclamó: —¡Eres brillante, Jeremy! Sebastián y Jeremy planearon ir a jugar billar. Edwin también planeó encontrarse con alguien más pero. Antes de irse, comentó: —Hada y las demás han ido a la piscina. No me preocupa Hada, pero Camila y Verónica llevan unos trajes de baño muy sensuales. A
Capítulo 275 —Hablemos. La distancia entre ellos era tan corta que Sebastián podía percibir la leve fragancia que emanaba de Verónica. Frunció el ceño, no del todo acostumbrado a ella. Él quiso irse por un lado, pero ella lo bloqueó con el otro brazo. —No es necesario que hagas esto —su voz era tan fría como el hielo. —¿No estás dispuesto a explicarlo o realmente hay algo entre ustedes dos? —presionó Verónica, con los ojos llenos de dolor. Ella estaba furiosa en el restaurante, pero después de calmarse y reflexionar sobre el asunto, sintió que no era propio de él hacer algo así. Además, no percibió ninguna señal de que él estuviera con otra mujer en el hotel esa noche. —Piensa lo que quieras —murmuró Sebastián plácidamente, sin el menor atisbo de emoción. ¿Qué pasa? ¿Se ha vuelto tan superficial conmigo ahora? Su tono frío y plano hizo que la sangre de Verónica hirviera, y ella le señaló el pecho con un dedo. —Sebastián Cole, ¿te va a costar la vida decir unas palabr
Capítulo 276: Malentendido resuelto La sonrisa en el rostro de Verónica estaba teñida de tristeza cuando dijo: “Tampoco esperaba que una carta consiguiera que nos alejáramos durante tantos años. Cuando nos volvimos a encontrar en el hospital aquella vez, pensé que estabas enojado conmigo porque no hablé las cosas contigo antes de tomar cualquier decisión. Si Andrew no me hubiera dicho lo de la carta, tal vez este malentendido hubiera quedado sin resolver por el resto de nuestras vidas”. —Sí. Pensé que habías encontrado a un hombre mejor que yo después de leer esa carta —admitió Sebastián. En ese momento, se sintió devastado. Amaba a Verónica hasta los huesos y estuvo dispuesto a aceptar cualquier demanda de su padre solo para que la aceptaran y le permitieran casarse con ella. Ya tenía su anillo de bodas preparado. Pero las palabras de esa carta le rompieron el corazón en lo más profundo, y el resentimiento hacia Verónica creció cada día más. Pero, desafortunadamente, el gran a