Capítulo941
Teresa secó las lágrimas de sus ojos.

—No pienses demasiado en eso, la tía les preparará algo delicioso.

Nicolás asintió:

—Ajá.

Arriba, Leo entró al cuarto.

Al ver a Liliana acurrucada en un rincón, mordiendo sus labios mientras lloraba, su corazón se encogió de dolor.

Se acuclilló junto a ella. Pasados varios minutos, Liliana finalmente se secó las lágrimas con sus manitas y miró a Leo.

—Leo, no te preocupes por mí, estoy bien— le dijo.

Leo esbozó una leve sonrisa hacia ella.

—Parece que Liliana maduró de un día para otro.

Agotada de tanto llorar, Liliana se acurrucó en los brazos de Leo.

Con voz suave y nasal, dijo:

—Leo, extraño mucho a mamá, a papá, al tío y al tío Kerri...

La mirada de Leo se ensombreció.

—Yo también los extraño mucho.

Liliana preguntó:

—Leo, ¿crees que el tío y papá siguen vivos?

—Liliana, creo que no tener un resultado definitivo es el mejor resultado.

No tener un resultado definitivo es el mejor resultado...

Liliana abrió los ojos desde el abrazo de Leo
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo