Capítulo890
Luis y Mariano se apresuraron a ayudar.

Observando cómo se alejaba Ximena, Kerri siguió lentamente, con las piernas pesadas como plomo.

Liliana no pudo contenerse y se lanzó a los brazos de Nicolás, llorando desconsoladamente. —Hermano, no quiero quedarme sin mamá...

Nicolás también comenzó a llorar, acariciando la espalda de Liliana y tratando de calmarla. —Está bien, Liliana, mamá estará bien.

Leo, con los ojos enrojecidos, también acariciaba la espalda de Liliana mientras la consolaba. —Liliana, debemos creer en mamá. No nos dejará tan fácilmente.

Al escuchar las palabras de los niños detrás de ella, Kerri bajó la cabeza desanimada.

¿Fue Samuel?

¿Es él quien está detrás de esto?

Basándose en lo que escuchó de Manuela, Kerri concluyó que aparte de Samuel, no había nadie más que podría haberla enviado.

Kerri apretó los puños con furia, sus ojos brillaban con un intenso odio.

¡Tenía que encontrarlo! ¡Tenía que enfrentarse a Samuel y descubrir la verdad!

Kerri se volvió hacia los niños.
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo