Narra el Dios griego o demonio.
Nunca pensé que al iniciar una chat iba a llegar a tener una conversación por mensajes y llamadas tan calientes, y que con sólo escuchar su voz e imaginarme como sería el contacto de mi piel con su cuerpo me podría tan duro. ¡Maldición! En estos momentos estoy tan duro, como quisiera que algún día ella perdiera un poco el miedo y se atreviera a más, deseo tanto tocar su piel y recorrerla completamente con mis manos y boca.
El día de ayer no pude escribirle en todo el maldito día, quiero a mi hermana, pero el día de ayer fue un puto grano en el culo, no me dejo ni un solo momento y cuando agarraba mi teléfono para escribir ella metía el ojo queriendo averiguar, es una chismosa de primera.
Y hoy por fin cuando pude escribirle me sentí tan bien, pero me ha dejado una duda. ¿Por qué me dijo demonio? le llame enseguida pero al parecer había apagado el teléfono.
Subí a mi habitación y me duche durante un buen rato, me imaginaba a
No podía creer lo que había pasado, primera vez que me atrevo a dejarme llevar por mi imaginación, y resulta que quedo hecha un volcán a punto de erupción, así que tuve que hacer acopio a mi descubierta imaginación calenturienta y encaminarme al baño y tocarme como si fuese el, hasta quedar más o menos satisfecha. "Necesito tener sexo con un hombre pero ya" penséMe acosté a dormir más frustrada que nunca, daba vueltas y vueltas en la cama, sin conciliar el sueño, así que me levante y camine hasta la cocina, me serví un vaso con leche y lo introduje en el microondas, luego de beberlo me fui de nuevo a la cama hasta que el sueño me dominó.Lunes por la mañana ya me encontraba en el trabajo, más aburrida que siempre, la doctora se encontraba atendiendo un gato con problemas de estreñimiento y el doctor estaba con una rubia despampanante que trajo a su perrita porque según ella le tocaba una vacuna, ¡já! La que necesita vacuna es ella, pero una para evitar lo zorra,. Pa
Ya estaba a punto de llegar a la esquina acordada, las piernas me temblaban y las manos empezaron a sudar, las pasé por el asiento del carro para secarlas y tratar de controlar mis nervios.Le pedí al taxista que parara unos cuanto metros antes y baje pagando el precio por el servicio, mire a todos lados y no vi a nadie así que camine y me oculte detrás de una pared a esperar que él llegará, lo vería de lejos primero y si me animaba y si me atraía si presencia más de lo que me atraía las fotos llegaría a la cita sin arrepentimiento, de lo contrario correría en dirección opuesta y no volvería a escribirme con él.Unos minutos después veo a parecer un hombre alto, fornido, veía disfrazado de pirata, traía un pantalón negro holgado y un poco gastado traía atado una especie de bufanda roja a su cintura y un chaleco negro dejando ver to
Mi corazón palpitaba a mil por hora, me encontraba jadeando y extasiada, lo miraba como se movía por la habitación mientras quitaba su chaqueta.Yo aún estaba en la cama completamente vestida, pero la ropa ya empezaba a molestarme, quería arrancármela como si fuera una fiera salvaje, o tal vez terminar de quitar la de él.Él se terminó de quitar la chaqueta y la bufanda roja que tenía en su cintura, luego quito los zapatos negro y camino como una pantera hacia donde yo me hallaba.Detuvo su caminar justo al final de la cama, tomo mis pies y los tiro hacia él, haciendo que yo quedara acostada completamente, ya que me había sentado para observarlo.Se colocó encima de mi muy lentamente, pero luego sin ninguna contemplación atacó mi boca en un beso desesperado, un beso que me robaba el aliento. Yo no me quedé atrás y le devolví el bes
Narra AndreaDesperté y me encontré abrazada a un cuerpo, abrí mis ojos lentamente y ahí se encontraba el, no pude evitar sonreír, e imágenes de la noche anterior vinieron a mi mente..Lo veía allí dormido tan relajado y profundamente, de repente me dio unas ganas enormes de quitar, o levantar solo un poco la máscara que llevaba puesta, acerque mi mano muy lentamente hasta su rostro, las manos me picaban, mi estómago se contrajo a la vez que sentía como si gusanos estuvieran comiendo mi interior, mi corazón latía frenéticamente a medida que iba acercando mis manos a su rostro, están temblaban, De pronto recordé que fui yo la que puso las reglas, y como tal tenía que respetarla, así que aleje mi mano y poco a poco me fui separando de él hasta que me levante por completo de la cama.Me encontraba completamente desnuda, a excepc
-¡CUIDADO!! Escuche a un hombre gritar cuando estaba a punto de darle mi número, me volteo hacia donde escuche la voz y veo un perro del tamaño de un toro corre hacia donde yo estaba perseguido por su dueño.Me quedé más tiesa que un palo, no me movía ni nada, creo que se me olvido hasta respirar.No sé cómo, ni cuándo pero volví en si cuando siento ser aplastada por un cuerpo contra el piso, abrí mis ojos lentamente y me encontré con el rostro de mi jefe muy cerca del mío.Lo empuje para quitármelo de encima, pero era muy pesado, él sonreía aún más y yo quería golpearlo.-más vale que te quites en este instante, o te golpeare. - dije con los dientes apretados, para no gritar.Él se apartó, y yo me puse de pie, y empecé a buscar al hombre que había sido capaz de soltar semejant
Un calor me fue invadiendo y eso que ya no llevaba nada de ropa, solo mis bragas. Deje por un momento el trabajo de pasar una de mis manos por encima de mis bragas y las subía a la altura de mis pechos donde con mis dedos tome mis pezones para apretarlos, halarlo y soltarlos de golpe haciendo que mis pechos reboten escuché un jadeo que hizo que fijará mis ojos en la pantalla de la computadora.Abrí mi boca de par en par, mi garganta y labios se sacaron, mi corazón empezó a latir con más fuerza y sentí mi clítoris palpitar entre mis piernas pidiendo más atención, y todo eso por ver al hombre que se encontraba al otro lado de la pantalla completamente desnudo, y aunque ya lo había visto, no pude evitar sorprenderme, este hombre me encantaba, y a pesar de no haber visto su rostro, en estos momentos me importaba un carajo si er
Supuestamente para mi jefe yo estaba pensando su propuesta, pero en realidad ya la había aceptado desde el segundo después de haberla propuesto, lo que estaba realmente pensado era cómo iba a trabajar junto a él.No he tenido mucho trato con él, no más de lo que era necesario, solo me dedicaba agendar sus citas, hablar con los dueños de los paciente, alguno que otro pedido de medicinas y utensilios para cirugías y curas, pero hasta allí, no hablaba mucho con él pues ya sabía que era lo que tenía que hacer y listo. Pero ahora que estaremos en una misma habitación sería todo diferente, ya que él me parecía demasiado atractivo, es un hombre serio y misterioso de cierta forma y yo soy un poco curiosa.Mi jornada laboral estaba por terminar as&
Llegue a mi casa, con una sensación extraña en mi pecho, era una mezcla de sentimiento que iban desde el miedo, a la angustia y de rabia a la impotencia.Miedo, por las palabras que me dijo Adams, y si de verdad era capaz de hacer algo solo para que este con él, o en dado caso para que no esté con más nadie. Angustia, porque algo me decía que de ahora en adelante tendría que estar más pendiente de todos, y que tenía que buscar la forma de ver cómo hacer para que entienda que no quiero nada con él. Rabia, porque no debí desde un principio aceptar ninguna de las invitaciones que me hizo, no debí dejarme llevar por su apariencia e impotencia, porque me estaba sintiendo atada de mano, ya que por más que le daba vuelta no sabía cómo diablos hacerle entender que no lo quería.Cuando entre a mi casa me quite la ropa apenas cruce la puerta y la lance a cualqui