Lidia.

Hoy el día es bastante agitado me despertaron temprano con el desayuno en la cama para después meterme a la ducha, me hubiera gustado que Heidi me atendiera pero en su lugar fue Esther que a mí ver no le caigo nada bien ya que me habla un poco golpeado y las miradas que me da son de desagrado pero no le doy importancia ya que no es la primera vez que una persona me ve de esa manera pero tampoco se lo voy a pasar por alto ni tolerar tanto tiempo, escucho cómo me toca la puerta con un poco de fuerza.

-señorita podría darse prisa debe de estar abajo para recibir a los invitados.

-pero la boda no empieza asta dentro de cinco horas.

-¡ no me importa Logan desea que estés allí !

Salgo de la regadera y me envuelvo en una toalla en el cabello y tomo otra para mí cuerpo, abro la puerta del baño un copo molesta y doy un suspiro.

-ya te escuché no me grites.

-lo siento pero no tengo tiempo para alguien que parece tortuga.

-cual es tu maldito problema.

-que tengo que estar lidiando