En un lugar desconocido...
― ¿Mi señor? ― dijo un hombre de edad mediana con temor― ¿me mandó llamar?
― ¡¿Cuál era tu tarea?! ― dijo un hombre sumamente atractivo, estaba sentado en su silla cuál rey fuera, todo su ser desprendía un aura fría pero elegante, su porte autoritario hacia temblar a cualquiera que lo quisiera retar pues en sus ojos solo había odio y rencor.
― Que ella renunciará... ― murmuró, tenía miedo del hombre frente a él, sabía lo cruel que podía llegar a ser.
― Y no lo hizo... ― dijo el con voz grabe.
― ¡Mi señor! Ella logro convencer a toda la junta directiva de aplazar el tiempo...
― ¡NO ES ESE EL RESULTADO QUE ESPERABA! – respondió en voz alta, su semblante mostraba lo molesto que estaba en ese momento ― Te pago una buena cantidad de dinero ¡¿Para que me salgas con esta mierda?! ― el hombre le lanzo un cenicero ante su molestia.
― Mi señor encontraré una forma de hacerla renunciar o que sea echada… ¡Ella ti
— jefa ¿Esta segura de comprar esta bodega? — me pregunto Ana cuando llegamos al lugar, si bien no le he dicho mis planes, es aquí donde deseo tener ese cuarto lleno de mis bebes.— Si, tu tranquila, después te explico… — camine hacia el agente inmobiliario para terminar todo el proceso.— La bodega no ha sido usada en mucho tiempo señorita, pero haremos nuestro mejor esfuerzo para renovarla de acuerdo con su boceto. El arquitecto le llamara después para afianzar detalles… — explico el agente.— Perfecto, que todo quedé de acuerdo con lo que pedí. El pago ha sido realizado, así que espero sigan al pie de la letras mis instrucciones — respondí con seriedad — no me gustan los errores ni mucho menos que me quieran ver la cara en algún momento, señor Leonard — miré que se puso nervioso, me pareció gracio
— Mi señora, investigue como me pidió y revise lo mas cautelosamente posible las pertenencias de su madre y el señor Hunter — su voz temblaba, era obvio que estaba nerviosa.— ¿Por qué estas tan nerviosa? — señale sin dejar de mirarla.— Yo… yo… mi señora créame que de verdad no sabía nada… — comenzó a llorar de manera incontrolable, lo que me hizo preocuparme. ¿Qué era aquello que descubrió? ¿Era tan malo?— Haber Liana, tienes que calmarte… si no, no podremos avanzar y esos idiotas saldrán impunes — tome sus manos y trate de tranquilizarla.— Mi señora… su madre ha estado poniendo veneno en el te que tomaba cada noche… — me quede paralizada cuando soltó esas palabras… mi cuerpo comenzó a temblar, la ira se incremento en mi
— ¿Dayan estas bien? — siento mi cuerpo temblar, no se por que no tengo memorias sobre esto. Pero eso explicaría por que siento asco al acercarme a ese hombre.— No… — Liam tomo mi mano, la acaricio buscando calmar mi dolor.La garganta me quemaba, mis ojos picaban de querer llorar, respiraba con dificultad. En mi mente los gritos de Dayan eran demasiado fuertes, cada imagen se impregnaba con fuerza en mi mente, provocándome asco de mí misma.— Mejor, dejemos de ver eso… — hablo Liam.— ¡No! — grité — No… déjame ver lo que ese idiota me hizo — respondí apretando los dientes — quiero recordar cada asquerosidad suya. Como cumplió sus más jodidas fantasías… déjame — me pego a su cuerpo y beso mi cuello, sentí como mi piel se erizo con su contacto.— Si quiere
Al siguiente día desperté en los brazos de Liam, era de madrugada todavía por lo que él seguía dormido. No recuerdo cuando fue la ultima vez que esto me había pasado, definitivamente Liam era genial en sexo, pero sobre todo por que te tocaba con la mayor delicadeza.Me levante de la cama tratando de no despertarlo, camine desnuda hasta el armario en busca de mi ropa para ir a la empresa de Dayan. Tania pendientes que realizar, contactos que buscar e información que procesar. Tomé la roma interior, así como una toalla y me encerré en el baño.Mientras preparara la tina me quede mirándome en el espejo, los recuerdos de ese hombre abusando del cuerpo de Dayan me hacían estremecer. ¿Cómo soportaste tanto Dayan? ¿Por qué eres tan débil? Parte de mi enojo era con ella, por no decir nada… por no defenderse. Me recargue en el lavabo con la respir
Después de que Colin salió de mi despacho comencé a revisar las cuentas y transacciones que Liana me había proporcionado. Aunque estudie contabilidad en mi vida pasada, había muchas cosas que eran diferentes en estos tiempos. Me detuve a pensar un momento tratando de buscar en la memoria de Dayan como hacer todo esto.Trate de respirar hondo, relajarme. Tome café, varias tazas de hecho pues mi querido Liam había sido toda una maquina sexual anoche… ahora que lo pienso, disfrute mucho ese toque, pero… no se si Dayán lo hizo. Ha estado muy callada últimamente, desde que me pidió esta mañana que tuviera plena libertad con su cuerpo no me ha vuelto a hablar… ¿Qué estará haciendo?Revisé nuevamente los documentos y esta vez, pude entender a que se refería cada numeración. Había transacciones de cantidades pequeñas que aume
— ¿Qué es lo que tendremos que hacer? — pregunta Liam mientras le muestro las transacciones y todo el lavado de dinero que han hecho entre ellos, según lo que me entrego Liana.— Empujarlos a la desesperación, han estado sacando capital de mi empresa como si fuera su caja fuerte. Hay que cambiar a todo el personal que se encargue de la administración de recursos. Sin avisarle a nadie… — explique.— Y seguir fingiendo que las transacciones se movilizan… — asentí, sabia que debía haber una forma de poder engañarlos.— Exactamente, mientras ellos piensan que sus bolsillos se siguen llenando…— Nosotros retomamos el dinero robado… para eso necesitamos un buen personal contable, administrativo y de sistemas — había aun palabras que no me cuadraban del todo, pero en cuanto las decía el conocimiento de Dayan se a
Llegamos al restaurante al cabo de un rato, Liam me guio hasta la sala donde estaban reunidos su padre y el socio. Había una sensación extraña en mi interior, como si fuese a conocer a alguien importante para mí. Era una sensación que jamás había sentido, respire hondo cuando nos paramos frente a la puerta del salón privado.— ¿Estas nerviosa Dayan? — me pregunto Liam tomando mi mano — tus manos sudan mucho.— Quizás es el calor… — me excuse, ni siquiera conocía a esos hombres y ya me estaba poniendo nerviosa « ¡Cálmate Elizabeth! Tú puedes hacerlo… ¿Dónde está esa mujer despiadada y fría? » me reprimió mi subconsciente.— Okay, vamos — abrió la puerta con una sonrisa en el rostro. Todo fue pasando en cámara lenta, mi entrada al salón,
Es difícil descifrar tu propio corazón cuando te has determinado a no buscar una relación. Quería ser libre en muchas maneras y, esta era una de ellas. Tanto tiempo reprimiendo mis deseos simplemente por un esposo que no estaba a mi lado, siempre me trato como su esposa sí, pero el sexo era solamente para que yo quedara embarazada. Siempre usaba los juegos sexuales con mis sirvientes, pero, era solo eso, sexo vacío.No recuerdo algún momento en la que me toco de la forma en que Liam o Marshall lo hicieron, no fui una santa por que hice mucho daño eso no lo negare, pero si, ahora tengo esta nueva oportunidad de vida; la aprovechare al máximo.— ¿Estas segura de esto Dayan? — Marshall había cerrado la puerta, sabía que Liam tardaría un tiempo y, aunque no era mi pareja, estaba acompañándome en este proceso.— Mi sexualidad es mía, no te