Ha pasado dos semanas desde mi secuestro y por fin he podido convencer a Sofía de que estoy bien, en realidad la amenace con que no la dejaría besarme si no me dejaba regresar a mi trabajo, primero hizo un lindo puchero pero yo me mantuve firme hasta que se dio por vencida y acepto dejarme ir.

Regresé a la comandancia donde tanto Wells como Andrew me regalaron pero con mis habilidades los convencí de que me dejaran trabajar como que con gran dificultad aceptaron.

No había sabido nada del quemado hasta ese día en que me llamó.

- Necesito verte - Dijo apenas conteste pero no se si era mi imaginación pero su voz sonó más seria de lo normal.

- ¿Acaso es otra trampa? - Le pregunté un poco molesto.

- Ja - Soltó una risita amarga - Asura sospechaba que hay un infiltrado y quiso matar 2 pájaros de un tiro por suerte soy listo y no me dejo atrapar - Dijo pero contrario a mis expectativas no soltó su típica carcajada

- Ya no confío en ti - Le dije honestamente.

- Bueno lo intente por las buenas