A la mesa llego un hombre enorme vestido de mujer, le dijo así mismo algo al oído a Alexander que le sonrió y se levanto, llegaron a la pista y comenzaron una canción de Mambo, fue espectacular verlo bailar junto con el travesti esa canción el movimiento de los hombros, las caderas todo al terminar igual lo ovacionaron y el rey sonreía contento, estaba disfrutando el paseo, regreso a su mesa

—Si también es vampiro, antes que pregunten

Y no se nota que sean vampiros —dijo Anthony

—No, se cuidan y tratan de no chupar sangre, pero cuando presencian un asesinato o van a violar a aguien, las rescatan y les drenan la sangre al violador o asesino y los desaparecen, es la Ley de los vampiros, hace siglos que la impuse.

—O sea que si chupan sangre,  ¡pero a gente mala!

—Si, eso hacen y son como ustedes los humanos trabajan, comen,  etc

Martha miraba a Alexander con curiosidad y Él a ella,  Anthony se dio cuenta y sonrió.

—Martha bailemos,  ¿deme ese gusto quiere?

—Pero ese ritmo merengue no se bailar

—No se preocupe yo la guio, ¡vamos!

Llegaron a la pista y empezó el merengue del perrito

—Martha, míreme a los ojos

Martha lo miro y Alexander le dijo

—Es una buena bailaría de merengue

Y comenzaron a bailar, era hermoso lo sdos bailaban perfecto ese ritmo que la gente se hizo a un lado e hicieron un circulo, Anthony jamás había visto a su hermana bailar así, cuando terminaron los aplausos eran a rabiar, fueron a su mesa y Anthony  dijo

—Guau,  ¡jamás te vi bailar así Martha!

—No se que paso de repente sentí que podía hacerlo

Alexander sonrió mirándola sorprendida pero alegre, le tomo las manos entrelazándolas con las de Él,  Anthony estaba con la boca abierta mirando eso y se imagino que Dracula se enamoro de su hermana.  Se levanto como resorte para bailar y los dejo solos

Martha se sorprendio al sentir sus manos juntas y la mirada penetrante de Alexander

—Martha,  ¿me permitiría cortejarla?

Eso fue una sorpresa para Martha, un Rey y el vampiro mas famoso de la historia de la humanidad pidiendo cortejarla a ella una simple chica

Alexander yo…yo…

—Martha, usted me gusta, me he enamorado de usted, yo no soy una persona que anda por las ramas, me gusta ser directo y además en el mundo vampirico lo que soñamos lo mismo se conoce con el nombre de almas, es cuando nacen para estar juntos para siempre y el mejor ejemplo es que usted soño conmigo dándole un beso y… bueno lo de los pechos y le dije que yo la amo y que usted me ama.

Martha se sonrojo al escucharlo describiendo su sueño y se puso nerviosa

—Disculpe si la estoy incomodando, es que soñé lo mismo que usted y yo se bien que es eso, ya que pase por lo mismo hace siglos con otra mujer que fue mi esposa,  pero ella se suicido pensando que había muerto se llamaba Elizabeth.

—Alexander creo que lei esa historia de Elizabeth,  entonces lo que siento y sueño es porque ¿naci para usted?

—Si Martha asi es y se que estas enamorada de mi, tus miradas lo dicen

Martha estaba sonrojada y nerviosa, lo miro y era verdad le gustaba ver sus hermosos ojos azules, sus labios, todo de ÉL.

—Yo en cambio siento lo mismo,  pero no doy a notar es ya por mi experiencia, que me contesta Martha,  ¿me acepta que la corteje?.

—Si Alexander acepto.

Y Alexander se acerco al rostro de Martha y ella al de Él y se besaron  despacio, Anthony había estado viendo a la pareja y sonrió viendo el beso.

—Hasta que encontró quién la ame de verdad —dijo Anthony

Alexander miro sonriendo a Martha, le beso las manos y Martha estaba sonrojada y nerviosa, esto le causaba alegría por verla así de timida, en cambio ella lo miraba como algo divino que le estaba pasando.

Otras mujeres que ya le habían echado el ojo a Alexander estaban enojadas al ver el beso y el amor con que ese hermoso miraba a Martha.

Alexander se levanto un momento diciendo que iba al baño, que no demoraría, esto fue visto por una chica que le gusto desde que lo vio, se quedo afuera del baño de hombres esperando que saliera, cuando lo hizo venia secándose las manos y esta mujer lo abordo, lo beso, lo abrazo y lo jaloneo hacia unas escaleras y dijo

—Guapo, me gustas, te deseo, vamos allá ariba hay unos cuartos, no demoraras no creo que tu noviecita se desespere los vi llegar y ese creo es su hermano,  ¡vamos!

Alexander  vio su oportunidad de sexo y sangre, le agarro la mano sonriendo y subieron, entraron, ella se desnudo rápidamente y Él hizo un ademan mágico y quedo desnudo, ella se maravillo cuando le vio el cuerpazo musculoso y hermoso, lo avento a la cama y se le subio a acariciarlo, olia riquísimo el aroma varonil y ÉL después la acostó se le subio encima le acaricio salvajemente mordiéndole los pezones haciéndola sangrar un poco y lamiendoselos, la excito tanto que ella decía

—Te deseo dentro de mi hazlo, estoy caliente

Alexander se posiciono y la penetro brutalmente y sus embestidas eran como de un animal haciendo gozar como nunca a esa mujer, sintió el climax y al mismo tiempo ella, pero Él rugio como animal al tener el orgasmo y ella le miro los ojos eran rojos y se asusto, pero Él estaba encima de ella,  como era enorme y pesaba ella no podía hacer nada y Alexander dijo

—He disfrutado contigo mujer y ahora seras mi alimento, tú me invitaste y hora sabras quien soy,  jajaja,  Hola mujer soy el Conde Dracula

Y ella vio los inmensos colmillos que se acercaban a su cuello y grito pero ya fue tarde porque se los clavo mientras se movia dentro de ella otra vez embistiéndola y al tener su orgasmo Dracula también estaba terminando de quedarse con la sangre de ella y la mujer murió, se levanto hizo un ademan,  desaparecio el cuerpo de ella y se vistió quedando como si nada,  salio a velocidad de ahí, nadie se dio cuenta de nada y regreso a su sitio al lado de Martha.

Ella estaba distraída ensimismada viendo a su hermano bailar con una linda chica, Alexander se sento a tomar su copa,  Martha después de un rato miro y vio que estaba ahí, le sonrió y Él a ella

—No me di cuenta en que momento llegaste, mi hermano parece trompo bailando, jaja

—Si me di cuenta cuando la saco a bailar

Ya se hizo tarde y salieron para regresar a casa, en el auto Martha y Alexander se besaban,  pero eran besos delicados sin perversión o lujuria,  Dracula de verdad se enamoro de ella.

Al llegar, Alexander le dijo a Anthony,

—Creo que voy a bajar a hablar con sus padres,  voy a pedir permiso para cortejar a tu hermana

—Alexander,  en verdad?

—Claro que si,  fui educado a la usanza antigua,  esto no es un juego Martha, ¡te amo de verdad!.

Bajaron,entraron y Alexander dijo

—Ustedes disculpen, pero tengo que decirles algo muy importante, es sobre su hija y yo, por vengo a pedirles permiso para cortejar a Martha

Los padres de Martha estaban con la boca abierta, su hija nunca tuvo novio y ahora un rey les pedia permiso para cortejarla

—Esta bien Alexander,  tiene nuestro permiso

—Voy a tener cuñado —grito saltando Anthony

—Anthony no seas irrespetuoso —dijo su madre

Alexander sonreía viendo a su futuro cuñado brincando, cuando miro al rostro de Martha estaba sonrojada pero risueña mirándolo, se levanto le dio la mano a Martha y al estar frente a frente saco una cajita del bolsillo, saco algo de ahí, miro a Martah diciendo

—Martha,  ¿quieres ser mi novia?

—Si,  Alexander

Y le puso una anillo en el dedo,  al mirarlo Martha se dio cuenta que era un anillo de diamantes

Alexander la acerco a Él y la beso despacio y ella a ÉL

—Te amo Martha

Te amo Alexander

Los padres de Martha sonreían viéndolos,  su hija estaba feliz y eso era lo que les importaba a ellos.