Gregory

Fui solicitado para urgencias habían muchos heridos, era un caos, estaba agotado listo para ir a mi departamento para descansar, pero mi mente era un desastre, estoy perdiendo mucho tiempo y cada vez se aleja la mujer que quiero, al paso que voy estaré más solo que un perro.

-Gregory podemos hablar- suspiro.

-Madre estoy muy cansado y la verdad no me apetece estar discutiendo contigo, has perdido toda credibilidad y el respeto que te tenia, de verdad madre das pena ajena – tome mi chaqueta y mi maletín había sido un día muy largo.

-Hijo ¿Por qué no me dijiste que ella era la hija de Valentino Bianchi?

-¿Por qué te interesa? ¿Qué pretendes ahora? Mira madre no sé qué este pasando por tu cabeza pero no permitiré que sigas haciendo esto, déjala en paz creo que no haz entendido que amo a esa mujer, la amo por lo que es no por ser hija de alguien influyente.

-Si tan solo me hubieras dicho que era una heredera yo...

-¿Tú que mamá? No le hubieras dicho y hecho todo lo que le hi